MAS INFORMACION

Aguinis y los dolorosos rasgos de los argentinos

Realidad y fantasía

El género fantástico no ha prosperado en la literatura argentina porque "la ficción está en nuestra realidad, en nuestra vida cotidiana y no podemos competir. Hay hechos reflejados en los noticieros que no podemos creer como el caso García Belsunse, entre otros muchos ejemplos. La literatura más bien trata de darnos entendimiento sobre lo que está ocurriendo. Vivimos en un país de novela". Aquí la estabilidad es la inestabilidad, "siempre cambia todo, siempre hay novedades. Pero, son de fondo, son estructurales? O son maquillaje?". A los cambios estructurales se les tiene miedo, somos el país del gatopardo. Hay gestos políticos bocingleros pero más o menos seguimos en lo mismo".

A nivel psicológico se habla del miedo al cambio. "Argentina es un país conservador a pesar de las manifestaciones ruidosas de la izquierda que también lo es, porque lucha para que todo siga igual, que sigan los planes sociales, la universidad atrasada, la educación decadente, la burocracia en aumento, la pobreza, la sociedad de las provincias encadenada a los puestos públicos".

Los niveles de decadencia de la educación en el país representan "un verdadero escándalo, está limitado solamente al incentivo docente pero no se analiza a fondo el tema, cómo queremos que sea el sistema educativo, cuáles son los defectos crónicos. De modo que los argentinos somos responsables de lo que nos pasa".

Los argentinos tenemos muy serios defectos y seguimos engañándonos. "Cuando digo que el sistema universitario está anclado en ideas de principios del siglo XX y que nuestro estudiantado es conservador, ignorante e irresponsable, no es la excelencia sino el facilismo, estamos muy mal".

MAS INFORMACION

Aguinis y los dolorosos rasgos de los argentinos