El viejo oficio de calentar el ambiente

El "Septeto Matamoros" se presentó el miércoles en Casa de la Cultura de Roca, donde brindó un buen recital. Los cubanos actúan hoy por la noche en Neuquén. Sones, boleros y guajiras para levantar la fría temperatura ambiente.

"Matamo-ros" en su presenta-ción del miércoles en Roca.

ROCA.- Dicho en "cubano" suena distinto. Pero fue más o menos así: el año pasado el "Septeto Matamoros" había estado en la Argentina. En uno de los lugares de la gira, Paraná para ser más exactos, les pagaron con "Federales". Y Federales en el resto del mundo quiere decir algo así como billetes para jugar al "Gran Estanciero". Allá se fueron los cubanos con sus 600 federales olvidados en un bolsillo. "Y en Cuba, chico, eso no sirve ni para comprar una Coca-Cola". Pensaron, con cierta inocencia, que a la vuelta, o sea este año, podrían utilizarlos o incluso cambiarlos por una moneda más fuerte. "Pero ahora nos dicen que ya no sirven para nada! Todavía los tenemos. Fue una experiencia muy mala", contaba uno de los integrantes del grupo mientras el público en la Casa de la Cultura de Roca se desternillaba de risa.

Hacía falta un poco de realidad nacional contada de labios de un cubano para poder quitarle peso al bajón El "Septeto Matamoros" hace música con la mente puesta en la soleada geografía de Cuba. No es un dato menor. Desde hace unas semana las noches se han vuelto realmente patagónicas en el sur y tener un poquito de ron en las venas levanta el ánimo y despierta los sentidos. "¿Cómo puedes tú vivir aquí, hombre?", dice que le preguntaron una vez a un habitante de Ushuaia ("ahí tienen de mascota a un pingüino y hasta una foca"). "Es que me gusta el frío", fue la respuesta.

A cada cual su Paraíso La noche del miércoles, efectivamente, levantó temperatura con los "Matamoros" De eso viven estos cubanos simpáticos y afiatados: de calentar ambientes. El conjunto suena bien. Tiene una base sólida de percusión y bajo sobre la que "surfea" (en el caso de los cubanos mejor utilizar términos playeros) Damián Romero Lago y canta potente Raúl Pérez Lago. Sones, boleros, rumbas, guajiras y más este tipo de comentarios y anécdotas condimentaron el show del miércoles.

Hay que cerrar los ojos para soñar mejor. Es cuando más nítidamente aparecen los colores y las sensaciones del paraíso perdido. "Matamoros" es un típico conjunto cubano, uno de esos que el visitante disfruta en Cuba con un trag "fuertón" y miradas de soslayo a las chicas morochas que pasan sonriendo "Matamoros" también se ha subido a la ola provocada por el documental "Buena Vista Social Club", un big bang para bandas que desde hace décadas pululaban anónimamente en la isla.

Curtidos por las presentaciones y el profesionalismo que requiere cautivar a públicos tan distintos, los "Matamoros" desarrollan su show y nos invitan a viajar con la imaginación (qué otra cosa queda) hacia las deliciosas postales millones de veces publicadas en los suplementos de turismo de los diarios.

El conjunto, a pesar del traqueteo que implican estas giras (¿vimos mal o el cantante miró varias veces su reloj antes de concluir el show?) rinde un digno tributo a los músicos que hicieron nacer el maravilloso son cubano Claudio Andrade