Domingo 6 de julio de 2003

María del Carmen Finochi, por un mundo mejor

La docente y música presentó su disco de canciones infantiles en Choele Choel

CHOELE CHOEL (AVM).- Para los pocos adultos que concurrieron el viernes por la tarde al cine Sportsman, hubo momentos en que la emoción ganaba la piel. No era poca cosa ver cantar a cerca de trescientos chicos: "Libertad para jugar. Libertad para cantar. Libertad para ser uno sin la censura de los demas" Y no era ningun show foráneo, ni película, que los movilizaba, era María del Carmen Finochi, maestra y música de origen platense, pero hija dilecta de Choele Choel.

María del Carmen o Tachi, como la conocen todos en la ciudad, presentó el viernes en sociedad su primer CD: "Yo quiero un mundo mejor", hecho de canciones infantiles. Pero no de simples canciones, porque el origen de cada una de ellas tiene una explicación particular. Nacieron a partir de la necesidad que tenían los maestros para explicar por ejemplo: la gramática, la germinación de las plantas, las estrofas del Himno Nacional Argentino, la niñez de un niño mapuche, etc. Y hasta el título del CD, está hecho para los chicos y encierra el significado de la paz para ellos.

Todas estas canciones ya han sido adoptadas en los colegios de la zona. Así lo explicó María del Carmen a este medio. Sus principales colaboradores, en el tránsito a la creación fueron sus alumnos de la escuela rural de Paso Piedras, quienes además el viernes la acompañaron en el escenario del club Sportsman.

La sala del cine se vio colmada de chiquitos, que no superaban los 7 años, y que pertenecían a los distintos colegios de Choele Choel tanto públicos como privados.

El disco ha sido declarado de interés provincial por la Legislatura y seguramente pronto traspasara los límites de Valle Medio, porque todas las canciones son sumamente pegadizas y muy prácticas para explicar cuestiones que a los chicos se les hacen complicadas.

María del Carmen, pertenece a una familia de artistas, su padre es músico y sus nueve hermanos practican alguna disciplina artística, desde la música hasta la pintura.

Llegó a Choele Choel, como tantos otros migrantes urbanos en busca de un lugar en el mundo. "Yo estaba dirigiendo el coro de La Plata, pero llegó un momento, que decidimos con mi marido salir de la ciudad hacia el sur, no teníamos bien definido a dónde. Y llegamos a Choele CHoel y nos quedamos" sostuvo.

Para Tachi, una trabajadora incansable por la cultura, el disco es un sueño realizado. Pero también para quienes la rodean, porque conocen el enorme potencial artístico de la docente.

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