jueves 19 de junio de 2003

Publican la secuencia del cromosoma masculino "Y"

NUEVA YORK (Estados Unidos)- Una nueva etapa en la historia de las investigaciones del genoma humano se abrió, a partir del descifrado de la secuencia del cromosoma masculino "Y", una promesa de nuevas armas para la lucha contra la infertilidad, además de revelar secretos de la historia de la evolución.

La investigación fue realizada independientemente por un grupo estadounidense del Massachusetts Institute of Technology, coordinado por David Page, y los resultados del trabajo son publicados en la revista Nature. En el artículo, el genetista Huntington Willard, de la Duke University, definió a los investigadores del MIT como "nuevos Magallanes" que se adentraron en una miríada de secuencias repetidas y duplicadas varias veces, de modo aparentemente caótico.

Uno de los objetivos es hallar la clave de la infertilidad masculina "inexplicable", es decir de origen desconocido, pero también reconstruir el momento en que se produjo la separación de los sexos en la historia de la evolución.

Ese momento se remonta a unos 300 millones de años atrás.

En ese entonces, de un progenitor común, un cromosoma no sexual, se separaron el cromosoma masculino "Y" y el femenino "X". De aquel hecho sobreviven todavía en el cromosoma "Y" pequeñas secuencias que hasta ahora se conservaron idénticas a las correspondientes del cromosoma "X".

En consecuencia, el cromosoma "Y" es un documento histórico sin precedentes, en el que se registran millones de años de la historia de la evolución.

Alrededor del 95% del cromosoma "Y" es una suerte de "paria genético" pues está compuesto, en su mayor parte, por secuencias genéticas que se repiten, aumentando con cada replicación el riesgo de acumular mutaciones y transformarse en el llamado "ADN basura", un ADN de funciones desconocidas y aparentemente inútiles.

Sin embargo el cromosoma "Y" consigue evitar los riesgos de esas repeticio-nes, protegiendo en las secuencias repetidas los genes que son activos en los testículos.

Y es testimonio de esa actividad caótica del cromosoma masculino el hecho de que entre los dos brazos del cromosoma se produce un intercambio de secuencias genéticas tan intenso que el cromosoma "Y" de un hombre puede tener una diferencia de al menos 600 pares de bases respecto del de su padre (Télam-SNI)

® Copyright Río Negro Online - All rights reserved
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación