La lluvia seguirá complicando a la región norte de la Patagonia

CIPOLLETTI (AC) - La lluvia no les da respiro a los habitantes de las ciudades cordilleranas de Río Negro y Neuquén. El fenómeno que casi no se interrumpió en los últimos días se intensificará esta noche en la zona sur de ambas provincias, sin mayores consecuencias para los ríos regulados de la región.

La información que manejan los especialistas del Centro de Pronósticos de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas indica que las lluvias que ya están cayendo en la cordillera tendrán pulsos más intensos entre esta noche y mañana, especialmente en El Bolsón, Bariloche, Villa La Angostura y San Martín de los Andes.

En cambio, para la zona norte de la cordillera neuquina las mayores precipitaciones se esperan para el viernes.

Lo que en las zonas más bajas del sector andino será lluvia, en la alta montaña se transformará en nieve.

Lógicamente, estas lluvias están haciendo crecer los tramos más altos de los ríos que bajan de las cordillera y que terminan formando la cuenca del Negro.De todos modos, el aporte de agua no será tan alto y, además, los embalses de las grandes presas están lo suficientemente bajos como para poder absorber la cantidad de agua que ingresará al sistema.

Este frente húmedo que afecta el norte de la Patagonia repercutirá también en la Línea Sur y el Alto Valle.

En las zonas media y superior del río Negro -dijo la AIC- el tiempo estará signado por la inestabilidad.

En la segunda mitad de la semana en esta zona habrá períodos nubosos y probabilidades de lluvias y chaparrones, pero no se esperan vientos importantes.

La diferencia entre ambas zonas estará dada por la temperatura: mientras en la cordillera el frío no cederá, en el valle se espera que esté más templado.

Condiciones más o menos parecidas que las del valle se esperan en la zona de la costa atlántica.

Como las normas de manejo del agua en la cuenca indican que mayo debe comenzar con los embalses con niveles bajos, las posibles crecidas de los ríos de cordillera no afectarán el sistema, que está en condiciones de absorber el aumento de los caudales. De todos modos, los especialistas en hidrología de la AIC no esperan que las lluvias hagan crecer demasiado los caudales.