Domingo 15 de junio de 2003
		Prohíben la instalación de barracas en Chos Malal
		Los vecinos habían planteado la necesidad de que se ubicaran en lugares más alejados.
		CHOS MALAL (ACHM).- Debido a las quejas efectuadas por los vecinos en torno a la ubicación de barracas en el ejido urbano, se decidió por un lado prohibir la instalación de nuevos establecimientos de estas características en radio urbano y por otra parte emplazar a los titulares de las actualmente habilitadas para que en 6 meses se ubiquen en los lugares destinados a tal fin. Los vecinos habían planteado la necesidad de que las barracas se ubicaran en lugares más alejados de la población, debido a los problemas que ocasionan en el medio ambiente por la filtración de afluentes, malos olores, la presencia de moscas y otros insectos además de la utilización de productos químicos. Para dar solución al reclamo de los vecinos que se encuentran afectados, el Concejo Deliberante sancionó el miércoles la ordenanza 1883/03 donde se prohíbe la instalación de nuevas barracas dentro de la zona urbana, determinándose como única zona para su emplazamiento la denominada "Zona de servicios industriales" localizada al ingreso a la ciudad. Pero además dispusieron que los titulares de las barracas actualmente habilitadas dispondrán de un plazo de seis meses para reubicar sus actividades. La decisión fue adoptada debido a que la actividad comercial que realizan es considerada conflictiva para la población urbana y tanto los ediles como el ejecutivo municipal buscaban alternativas para la relocalización de estos locales comerciales que tantas quejas provocan por parte de los vecinos. Los ediles indicaron que "su funcionamiento produce problemas ambientales tales como fuertes emanaciones por el uso de productos químicos, la proliferación de insectos y alimañas, con posibles riesgos para la salud de la población". Para evitar el impacto de esta actividad con el medio ambiente y subsanar los inconvenientes que producen en el vecindario, los concejales decidieron que en 6 meses deberán reubicarse en la zona de servicios industriales y la comuna cuenta con las herramientas para denegar las habilitaciones de barracas en el ejido urbano. Actualmente en esta ciudad existen dos barracas, una ubicada en calle Justo, entre San Martín y Belgrano, lindante con un establecimiento educativo y las quejas en este caso tenían que ver con la filtración de afluentes desde la misma hacia una huerta escolar. Pero la escuela también sufrió daños en un paredón provocados al parecer por el constante fluir de los líquidos. Las moscas, los insectos y los malos olores forman parte de las quejas permanente de quienes habitan en las inmediaciones de esta barraca que además está situada a pocas cuadras del palacio municipal. Con respecto a la otra barraca, si bien está ubicada a a la margen de la ruta provincial 43 sobre la costa del río Curi Leuvú, en un lugar un poco más apartado, se encuentra a pocos metros del camping municipal, un lugar visitado por turistas que llegan a la ciudad. Los vecinos manifestaron que existen gran cantidad de moscas debido a la existencia de piletas al aire libre, las que además provocan focos de infección.
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