Más de 2.000 chicos siguen sin clases en Bariloche

La situación de los edificios escolares obligó a suspender actividades en varios establecimientos

Unos tienen clases y otros no. Varios problemas edilicios obligan a suspender actividades. Nadie dice cómo recuperarán los días.

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El fuerte deterioro de algunas escuelas de esta ciudad mantiene sin clases a más de 2.000 niños que, pese a los multiples reclamos formulados, no saben cuándo podrán retomar sus estudios debido a la falta de respuesta de las autoridades educativas.

Desde el inicio del ciclo lectivo 2003 siete establecimientos educativos se vieron obligados a cerrar sus puertas o alterar sus actividades curriculares por el mal estado de los edificios escolares que, en algunos casos, ponen en riesgo la seguridad de sus ocupantes.

Ayer un nutrido grupo de padres, docentes y alumnos, acompañado por algunos ediles, concurrió a la delegación local del Consejo Provincial de Educación en busca de soluciones y se retiró indignado por la falta de precisiones sobre las reparaciones exigidas y la recuperación de los días perdidos.

Los representantes de las distintas comunidades educativas increparon a la delegada local, Cristina Balest, por "la falta de sentido común" del gobierno provincial que "no realizó el mantenimiento en el verano".

La funcionaria se excusó en la falta de partidas presupuestarias que impidió ejecutar las obras programadas e informó que "en este momento se están reparando las escuelas y ejecutando obras por 500.000 pesos".

La edil Susana Rainone terció en la discusión redoblando las quejas de los padres. "Llegamos a esta altura del año con más de 2.000 niños sin clases y nadie nos dice cómo se va a hacer para recuperar los días pedidos".

La concejal manifestó preocupación por "la falta de garantías en los trabajos que se están realizando con contratos poco claros o inexistentes" y consideró que la única salida a la situación planteada pasa "por una decisión política clara del gobierno (provincial) para que haya educación en Bariloche".

La escuela 295 lleva un mes sin clases por falta de calefacción y todavía no hay fecha cierta para la reparación de la caldera, instalada por una empresa marplatense que debe proveer el repuesto averiado. "No puede ser que el trámite para enviar un presupuesto y conseguir un repuesto tome más de 25 días", se quejaron los padres.

El otro establecimiento que debió cerrar sus puertas hace tres semanas por serias falencias edilicias es la escuela 315, del barrio El Frutillar, donde las obras de refacción avanzan a ritmo lento y tampoco hay fecha cierta para el reinicio de clases. Al momento de clausurarlo el edificio presentaba inducción en las paredes, filtraciones en los techos, vidrios rotos, carecía de puertas en los sanitarios de niñas y alambrado perimetral.

  Padres disconformes

 Las explicaciones de Balest no conformaron a los padres que denunciaron demoras injustificadas por parte del contratista. "Vienen a trabajar de a ratos y al paso que van no van a terminar rápido" aseguraron.

Una situación similar se repitió con la comunidad educativa del CEM 51 que rechazó las soluciones ofrecidas por el Consejo Provincial de Educación y reiteró los reclamos formulados la semana pasada.

El lunes se sumó a la lista de establecimientos afectados el CEM 45 que decidió suspender las actividades en varias aulas -que presentan roturas de vidrios y falta de calefacción- para "preservar la salud de los alumnos", repitiendo la situación que se registra desde hace un par de semanas en la escuela 298.