Discuten la toma de empleados en el hospital cipoleño

Desde la dirección del centro de salud se argumentó la necesidad de sumar más empleados. Desde el Consejo Local no niegan la carencia, pero quieren otra metodología de ingreso.

Todos coinciden en que por la demanda hace falta más empleados para el hospital, pero las diferencias están en cómo se incorporan.

CIPOLLETTI (AC).- La designación de personal en el hospital "Pedro Moguillansky" de esta ciudad ya es motivo de polémica.

Mientras, la concejal María Elisa Lazaretti, miembro del Consejo Local de Salud, dijo que resulta "negativa" la forma en que se están tomando decisiones que tienen que ver con el incremento del personal, sin que el tema haya pasado por el Consejo, el director Walberto Díaz asegura que está "totalmente justificada" la intención de tomar más gente, entre ellas, mucamas.

Es más, sostiene que también es imprescindible la contratación de un médico generalista de un hematólogo y de un ginecólogo, tanto en el nosocomio cipoleño como en el de Fernández Oro.

Ahora el hematólogo que cumple funciones recibe un pago por una determinada cantidad de trabajos, pero se necesita a alguien contratado con dedicación mucho más exclusiva.

Lazzaretti le pide a Díaz "información fehaciente" respecto de la realización de 40 informes preocupacionales de personas que se han inscripto ante la oferta laboral de posibles vacantes.

Según Lazzaretti, no hay objeciones respecto de que se deba tomar o no personal para ese área de mucamas pero dice que también se deberían considerar "otras necesidades que hacen al funcionamiento hospitalario y de las cuales nos hemos pasado muchas horas de reuniones tratando de encontrar una solución".

Por eso, en el contexto de "tantas carencias hospitalarias" a Lazzaretti le resulta "llamativa" la apertura de inscripciones masivas para cubrir cargos de mucamas.

Le pide a Díaz que como director le reclame al secretario de Salud Pública, Alejandro Marenco, la obtención de los fondos necesarios para solucionar en el corto plazo "algunas prioridades fijadas oportunamente para lograr una mejor prestación en Salud".

Marenco dijo que el tema de las mucamas se halla justificado y se planteó ante un pedido de la jefa de ese sector, Graciela Martínez. Que dos surgirán de gente allegada al hospital, otras dos de quienes cumplen tareas en el plan Trabajar y que las dos restantes no serán del ámbito hospitalario.

Para Díaz, y no de ahora, se está planteando la necesidad no sólo de mucamas sino de profesionales para cubrir otros servicios, como el de hematología.

Se supo incluso que muchos enfermos con problemas de salud relacionados con sangre han de

bido esperar mucho tiempo para acceder a un turno, dado que el hematólogo se halla saturado de trabajo y no puede hacerse cargo de todo el cúmulo de análisis que llegan a sus oficinas.

Aparte, tanto en el hospital cipoleño como en el de Fernández Oro se necesitan médicos generalistas, en especial para tareas en los periféricos, que atiendan tanto a los adultos como a los niños y cuando los casos excedan su ámbito los deriven a los servicios pertinentes.

Están avanzadas las gestiones asimismo para la contratación de un odontólogo en Fernández Oro, tema que había movilizado a la comunidad de aquella localidad tiempo atrás, recibiendo como respuesta la promesa de que se le daría curso positivo al reclamo.

Entre las carencias, Lazzaretti hace alusión a la atención en los periféricos, porque -según comentó- muchos vecinos se quejan de que no reciben una atención adecuada y que en la mayoría faltan pediatras.

Díaz, por su parte, replicó que con los médicos generalistas se supera este problema, máxime cuando se dan derivaciones al edificio central.