Protestan por el crédito para las generadoras

CIPOLLETTI (AC) - Las distribuidoras de electricidad del país, que en la cadena del negocio son las que tienen relación con los consumidores, están que trinan por el nuevo envío de fondos que el gobierno nacional dispuso para el sector productor de luz con el fin de evitar una suba estacional de la tarifa.

En los 18 meses que lleva la pérdida de la relación uno a uno del peso con el dólar, los productores de electricidad ya se quedaron con los 180 millones de pesos que se habían reunido en un fondo de estabilización de precios que maneja la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (Cammesa), responsable del sistema de generación y transporte de luz, y encargada de las transacciones comerciales del sistema.

En mayo del año pasado, cuando comenzó a regir el período estacional en el que los precios suelen subir por mayores demandas y costos de producción más altos, los generadores recibieron una mejora tarifaria de hasta el 50% que todos los distribuidores con esquemas regulados trasladaron al precio final de sus facturas.

Los 180 millones de pesos del fondo estabilizador de precios fueron consumiéndose desde entonces hasta ahora. Como ese dinero ya no está, el gobierno nacional decidió otorgar 150 millones más para que, en el inicio de otro período estacional de invierno, el precio mayorista de la electricidad no se dispare.

Un aumento como el que se esperaba en el sector generador (del 40%) habría impactado en el precio final de la luz. Las distribuidoras -tanto las reguladas por Nación, como las que dependen de entes provinciales, como la rionegrina Edersa- vienen reclamando desde la devaluación que se le reconozcan los mayores costos generados por la inflación y los precios en dólares de sus principales insumos, pero hasta ahora no han recibido mejoras en la tarifa.

Por eso, la noticia del crédito del gobierno a los generadores cayó muy mal entre las distribuidoras.

El consumidor final -residencial, comercial o pequeño industrial- no tiene relación con los generadores y los transportistas de electricidad.

Es más: por tratarse de un ámbito federal, los entes reguladores provinciales, como el EPRE rionegrino, no tienen ingerencia sobre esos dos sectores del negocio energético y sólo pueden ejercer su poder fiscalizador sobre las empresas minoristas, como Edersa o la CEB barilochense.

El gobierno del presidente Néstor Kirchner le otorgará 150 millones de pesos al sector generador para evitar que los precios mayoristas, que no están regulados, disparen los valores finales de las facturas.

Se especula que de esta manera se logrará pasar sin aumentos el invierno, cuando la mayor demanda obliga a poner en generación las centrales a fueloil, que es un combustible mucho más caro que el gas.

La idea es que los productores de luz comiencen a devolver el crédito a partir de agosto.