El PJ siente los silencios de Kirchner

El presidente quiere poner color peronista a no menos de 14 provincias del país. Entre éstas computa a Río Negro. Pero se mantiene en un conventual silencio en materia de respaldo público al candidato del justicialismo rionegrino Soria. Este, sin embargo, mantiene el apoyo de otras franjas del gobierno nacional.

Soria, ayer en Cipolletti

Carlos Soria ratificó ayer que su candidatura a gobernador de la provincia por el PJ cuenta con el respaldo del presidente Néstor Kirchner.

- En estos días he hablado por teléfono con él debido a diversos temas y, entre otras cosas que me dijo, me ratificó su respaldo- dijo Soria a lo largo de estas horas por varias emisoras del Alto Valle.

Sin embargo, el silencio que sobre el tema mantiene en público el mandatario, genera incógnitas hacia dentro y fuera del justicialismo provincial.

Incógnita retroalimentada a partir de conocerse la decisión del presidente de luchar con candidatos propios para lograr el triunfo del peronismo en no menos de 14 provincias.

En su edición del martes, al analizar el tema "La Nación" señaló que Kirchner aspira "a fomentar la victoria de fórmulas afines en Tierra del Fuego, Río Negro, Chubut y Misiones".

Destacó además el matutino que "en la Patagonia, el jefe de la SIDE, Sergio Acevedo, tendrá poca resistencia en Santa Cruz (o sea para ganar la gobernación), mientras que el peso regional del presidente podría catapultar a hombres propios en Río Negro y en Chubut. Incluso se especula con el desembarco del secretario general Oscar Parrilli en Neuquén, siempre hostil al PJ".

El término "hombres propios" fue intensamente reflexionado en sus alcances por parte de distintos planos de la dirigencia del PJ provincial Se interpretó como que esa apreciación no involucra a la candidatura a gobernador que luce el legislador peronista Eduardo Rosso.

Hombre de extrema confianza del mandatario y "fundador" del kirchnerismo en la provincia, disgustado con la dirigencia del PJ rionegrino, busca la gobernación liderando el Movimiento de Acción Rionegrina.

No es nuevo además que Kirchner-Soria cultivan una relación no necesariamente sólida en el tiempo ni en la calidad.

¿Puede Kirchner desde su flamante y creciente poder bajar el dedo sobre Rosso en detrimento de la candidatura de Soria?

En el peronismo rionegrino la pregunta serpentea acompañada de dos reflexiones que fungen a modo de respuestas Una: aun admitiendo la proyección presente del poder de Kirchner, éste no puede dejar de computar la legitimidad de origen que tiene la candidatura de Soria.

Otra: si lo que quiere Kirchner es un amplio triunfo del peronismo a lo largo y ancho de las gobernaciones del país, no puede dejar de ponderar que con sus más y sus menos, el PJ rionegrino es, a diferencia del MARA, una fuerza con mayor grado de instalación en el conjunto de la provincia.

Y siempre en tren de especulaciones, en el peronismo provincial se manejan otras variables para analizar la eventual conducta del presidente en este tema.

Se indica -por caso- que es muy posible que Kirchner no se exprese en público, y en términos taxativos, en favor de Soria.

Y que sin aproximarse tampoco con ningún gesto en favor de Rosso, el presidente navegue en silencio y con bandera desconocida por la borrasca electoral rionegrina.

Kirchner sabe sin embargo que en una amplia franja de su gobierno hay hombres con poder que ya apoyan decididamente a Soria. Ese es el caso -por ejemplo- del vicepresidente Daniel Scioli y el ministro de Salud, Ginés García. Con ambos la semana próxima Soria se sentará para organizar, en el marco de la campaña electoral, visitas de funcionarios nacionales y una serie de seminarios sobre temas provinciales.

- Yo y el PJ seguimos- dijo anoche Soria en San Antonio.