Lo condenan a 12 años por crimen en Piedra del Aguila

Nicolás Pérez Alanis fue hallado culpable de matar a su novia.

Víctima y victimario son de familias conocidas en la localidad.

El fiscal había pedido 18 años de cárcel y la querella 25.

Nicolás Pérez Alanis (a la izquierda y junto a su abogado) recibió como atenuantes su "corta edad y su falta de madurez".

ZAPALA (AZ).- La Cámara de Zapala condenó ayer a Nicolás Pérez Alaniz a la pena de 12 años de prisión por el crimen de su novia Valeria Rubio, de 17 años, ocurrido en diciembre de 2001 en Piedra del Aguila La sentencia a prisión fue menor a la solicitada por el fiscal Héctor Trova y el querellante Juan Manuel Salgado, quienes habían propuesto 18 y 25 años de cárcel respectivamente. La defensa, en tanto, había exigido la absolución basada en el beneficio de la duda A la luz del veredicto, es una incógnita si los patrocinantes de Pérez Alaniz harán uso del recurso de casación que plantearon casi en el comienzo del proceso.

Los camaristas Oscar Rodeiro, Eduardo Sagues y Enrique Modina consideraron ampliamente probada la autoría del joven en el hecho que sacudió a Piedra del Aguila en las vísperas de la navidad de 2001.

Como agravantes de la conducta de Pérez Alaniz, mencionaron la golpiza que le propinó a la chica momentos antes de matarla. A la hora de hallar elementos que justifiquen el accionar del condenado, los jueces destacaron la juventud y su evidente "inmadurez".

Todas las pruebas recolectadas durante la instrucción y ventiladas en el proceso oral que se desarrolló en Zapala permitieron reconstruir paso a paso las últimas horas de Valeria.

Según confirmaron varios amigos de la víctima, Nicolás Pérez Alaniz la pasó a buscar la noche del 14 de diciembre en una camioneta Saveiro roja que pertenecía a Berta Vázquez, amiga y socia de la madre.

Luego de algunas horas fueron vistos nuevamente en la plaza del pueblo adonde llegaron caminando y de la mano. Luego de permanecer un rato allí, la pareja se retiró en dirección a la casa del condenado.

Al menos dos personas aseguraron durante el debate haberlos visto discutir fuertemente en la puerta de la vivienda de Pérez Alaniz. Según esta versión, Valeria lloraba y quería irse pero Nicolás la retenía contra la pared sosteniendo sus brazos.

Otros testigos aseguraron haber visto la camioneta de Berta Vázquez transitar por la ruta 237 en dirección al autódromo, donde fue hallado el cuerpo, poco antes del amanecer.

Uno de los elementos que más llamó la atención fue la violencia que utilizó el asesino para terminar con la vida de la chica. Todas las pericias coincidieron en resaltar que primero le aplicó una feroz golpiza en el rostro y después la asfixió con un elemento similar a un cinturón.

Diferentes profesionales confirmaron que la chica fue sujetada de atrás y que su muerte fue antecedida de una penosa agonía.

Pérez Alaniz fue detenido a la mañana siguiente mientras salía a trabajar normalmente. Los médicos que lo revisaron le detectaron rasguños y mordeduras en diferentes parte del cuerpo.

Más tarde se supo que de las muestras obtenidas en las uñas de la chica se encontraron rastros de piel y ADN del novio.

En el fallo, los camaristas también criticaron al defensor Gustavo Olivera quien había sostenido que su cliente no tenía el

ZAPALA (AZ).- La condena que recibió Nicolás Pérez Alaniz puso fin al caso que marcó para siempre a la pequeña localidad de Piedra del Aguila. Sus habitantes no habían vivido jamás una tragedia de este tipo. Las circunstancias que rodearon el hecho y la edad de la víctima contribuyeron a que el dolor se extienda más allá del paso del tiempo.

Valeria Rubio era la reina del pueblo. Con una sonrisa que la acompañaba siempre y sus 17 años contagiaba alegría entre sus seres queridos.

Ninguno de sus amigos imaginó aquella madrugada del 15 de diciembre la horrible muerte que le esperaba cuando la despidieron y la vieron alejarse de la mano de su novio, Nicolás Pérez Alaniz.

Durante el debate desarrollado en Zapala, el médico Carlos Losada entregó un detalle de la agonía que sufrió la chica antes de morir. Los datos que brindó el profesional ante el tribunal helaron la sangre.

Valeria fue golpeada en el rostro y después murió asfixiada con un cinturón al cuello La maniobra que ejecutó el asesino fue lenta, de acuerdo a la explicación de Losada, y no se descarta además que haya sido arrastrada desde atrás por un vehículo.

En sus uñas, los investigadores hallaron rastros de su propia piel y la de su novio.