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El trabajo de los mediadores

CINCO SALTOS (AC).- El grupo de mediación del Grupo BORA resultó fundamental para convencer a los atrincheraros en la casa de la calle Pacheco a que depongan su actitud y se entreguen.

Los que llevaron adelante esta mecánica, fueron los oficiales Wálter Muñoz y Christian Ferreyra. Con paciencia, y mucha conversación, dialogaron primero desde el acceso de rejas blancas de la casa y luego casi en el interior con varios hombres y mujeres. Se supo que el que inició la tarea fue Ferreyra y luego recibió el complemento de Muñoz, quien también realizó tareas de peritajes dado que integra el gabinete de Criminalística.

Munidos de una preparación específica, lograron su objetivo pero no sin estar más de cinco de las casi doce horas que duró el descomunal enfrentamiento.

Hubo momentos tensos. Sobre las 10 de la mañana, una mujer se asomó y gritó a los policías que rodeaban la casa: "a ver si tiran ahora que están todos los periodistas".

Talz vez siguiendo el ejemplo de lo que se exhibe en medios de comunicación, los atrincherados pidieron, antes de entregarse, la presencia de las cámaras de televisión -fue la gente de Aire Valle- y de un movilero de la FM Cinco Saltos. "Querían garantías de que no les iba a pasar nada", se informó.

"Nadie perdió la paciencia. Si era necesario íbamos a estar aquí tres días, pero queríamos llevar a buen término las negociaciones", confió un pesquisa que trabajó codo a codo con los oficiales mediadores.

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