Rechazaron en Arequito la expulsión de acusados por inseguridad

La confección de una "lista negra" fue rechazada por los propios familiares del joven asesinado, cuyo crimen originó la pueblada el lunes último. Reclamarán seguridad a Reutemann.

La cordura primó en Arequito y la asamblea desistió de presentar "listas negras".

ROSARIO- Alrededor de un millar de pobladores de Arequito volvió a congregarse, por tercera noche consecutiva, para repudiar el asesinato de un custodio y armar un petitorio con reclamos de medidas de seguridad para el pueblo.

El debate, en el que sobresalía una insólita lista con los nombres de 20 personas que varios vecinos quieren echar del pueblo, finalizó con una apelación a "seguir viviendo en paz y en calma" y la eliminación de ese listado.

Así, en la asamblea se impuso la postura impulsada por los amigos y familiares de Luis Cignoli, el joven asesinado, de "que no haya listas negras" en Arequito y el petitorio que se elevará al gobierno provincial se limitará a reclamar mayor seguridad.

De la movilización participaron Alicia Galo, la madre de Cignoli, una tía y dos amigos del joven, uno de los cuales, pidió también "que no se use la muerte de Luis para hacer política, por-que no lo vamos a permitir".

La polémica decisión de pedir que se eche del pueblo al grupo obedecía a que varios de los vecinos sostienen que se trata de "marginales" dedicados a la delincuencia que se esconderían en una villa de emergencia de la zona y que serían responsables de otros hechos violentos y homicidios ocurridos recientemente.

La asamblea acordó presentar su petitorio ante el ministro de Gobierno santafecino, Carlos Carranza, para exigirle "mayor seguridad" en la zona, "controles policiales en el pueblo y que se incremente el presupuesto para tal fin".

Ante el insólito armado de una nómina de "indeseables", la docente Griselda Ré, que organizó varias marchas de silencio y coordina las asambleas populares, explicó que "el listado fue realizado de manera consensuada", pero finalmente fue descartado.

En tanto, el jefe comunal Julio Vidosevich pidió con carácter de urgente una audiencia con el gobernador de Santa Fe, Carlos Reutemann, para tratar de buscar una salida pacífica a la situación de Arequito y reiteró que "todo se debe hacer dentro del marc de la ley e instó a los pobladores a que no se repitan hechos violentos" como la pueblada del lunes último.

Por su parte, la Cámara de Industriales de Arequito expresó en un comunicado que ante la situación "donde despiadadamente se utilizó un hecho tan doloroso tratando de desestabilizar las instituciones, repudiamos estos acontecimientos y le brindamos al presidente comunal Julio Vidosevich nuestro apoyo para que todas las medidas que se tomen sean encausadas en la resolución de los problemas que realmente afectan a nuestro pueblo".

En Arequito, un pueblo del sur de Santa Fe, prácticamente no existe desocupación pero hay una pequeña villa donde, según los vecinos, viven familias carenciadas que habrían sido trasladadas hace 15 años por punteros políticos desde otras ciudades santafecinas. (DyN/Télam)