Siguen investigando el asesinato de una mujer

La policía trata de averiguar dónde estuvo y qué hizo en sus últimas horas de vida

NEUQUEN (AN)- Con muchas hipótesis pero pocas pistas firmes, la Policía sigue investigando el asesinato de María Luisa Sobarzo (54), la mujer que apareció muerta a golpes en una acequia del barrio San Lorenzo. Lo último que pudieron averiguar los investigadores es que el sábado a la mañana salió de la casa de una de sus hijas, y tratan de determinar qué hizo durante todo ese día hasta la noche.

El cuerpo de Sobarzo apareció el domingo a la mañana, y de acuerdo con la autopsia la muerte se produjo durante la madrugada de ese día. Los forenses determinaron que no sufrió una agresión sexual, aunque tenía el pantalón desprendido y hay algunas lesiones defensivas en el cuerpo.

A los pesquisas les resulta difícil determinar si le faltaba dinero, porque no saben si lo tenía consigo. Sobarzo residía, alternativamente, con cada una de sus tres hijas, las tres radicadas en distintos puntos de la ciudad. La última que la vio con vida no supo decir si llevaba, por ejemplo, una cartera.

De acuerdo con fuentes de la causa, la mujer ejercía la prostitución con alguna frecuencia. Al parecer tenía un sector fijo, sobre la ruta 22 a la altura de la ex avícola. Las características del ambiente que frecuentaba representan un obstáculo para la investigación y abren un abanico de posibilidades respecto de quién o quiénes pudieron ser los autores del crimen.

Personal del departamento Homicidios logró ubicar a un hombre que tenía una relación asidua con la víctima. "Como si fuera el novio", indicó una fuente consultada. Le tomaron declaración y lo dejaron ir, porque no hay elementos en su contra.

Algunas de las hipótesis parten de la herramienta que utilizó el criminal. Se trata de una pesada "llave de boca", con la cual le golpeó el rostro hasta desfigurarla y causarle la muerte.

La llave, en la que quedaron manchas de sangre, fue sometida a pericias para buscar huellas digitales aunque no trascendieron los detalles de esa diligencia.

Un intento de violación, un robo, un crimen pasional, son algunas de las teorías que se barajan. Aunque por ahora, predomina la oscuridad en la investigación.