Murió Pocha Barros, la autora de "María Pueblo"

Era la madre de Marián y el "Chango" Farías Gómez. Tenía 86 años.

BUENOS AIRES (Télam)- La artista Pocha Barros, de 86 años, falleció ayer en la porteña Clínica Bazterrica, poniendo fin a una existencia al servicio de la expresión popular a través de la poesía, la canción y la acción.

Autora de lo que ella misma definía como "crónicas con rima", Barros es uno de los nombres esenciales aunque no tan conocidos del arte nativo.

Casada con el santiagueño Enrique Farías Gómez con quien tuvo cinco hijos (los reconocidos músicos Chango, Mariano, Pedro, Marián y Bongo), la creadora ostenta una larga carrera poética, varios libros editados, obras teatrales y unas 160 canciones.

En muchas de ellas trabajó junto con Astor Piazzolla, Víctor Heredia, Eladia Blázquez y Roberto Palmer, entre otros.

A esa imponente producción creativa, la mujer oriunda de Buenos Aires le adosó una actividad socio-política que la llevó a ser afiliada al justicialismo y a haber creado una emblemática peña como La Tribu en donde debutara el grupo vocal Huanca Huá y constituyera un espacio esencial para las nuevas voces de la canción popular argentina.

Algunos temas

Entre las canciones más conocidas de su autoría se cuentan "Romance de María Pueblo" (con música de Palmer y que se popularizó en la voz de Ginamaría Hidalgo) y "Aire de la zamba niña" y "Canto de noche y llovizna" (ambos con melodías de Piazzolla).

Entre sus poesías, de permanente impronta porteña, se cuentan "Buenos Aires nostalgia", "Plaza Lorea" y "Paisaje de barrio", mientras que su última y lograda publicación, fechada en 1990, se tituló "Gardel, vida y milagros de Buenos Aires".

Su pareja desde hace 33 años, el chileno Eugenio de la Cerda, definió a Pocha, en charla telefónica con Télam, como "una gran poeta, una gran madre, una gran escritora y, en suma, una gran persona".

De la Cerda atribuyó el fallecimiento de Barros al fallecimiento de dos de sus hijos (Mariano por una enfermedad a fines de 2001 y Bongo en un accidente a inicios de 2002) que, sostuvo, "la derrumbaron, le quitaron las ganas de vivir".

Además de esas heridas en el alma de su mujer, el chileno apuntó que la escritora "tenía la salud quebrantada desde hace siete años cuando le extirparon un riñón".

Pese al dolor por la pérdida, de la Cerda adelantó que aspira a apurar la culminación del libro póstumo de Barros, titulado "María Pueblo" (de cuyo texto nació la popular canción), "al que sólo le estaba faltando el último capítulo".

"Voy a tratar de que la encargada de terminarlo sea Marián, que estaba muy empapada de la temática de ese escrito", redondeó quien convivió con la artista desde 1970.

Los restos de Pocha Barros eran velados desde ayer a la tarde en la casa mortuoria sita en Independencia 3899, de esta capital, en una ceremonia para la que Eugenio de la Cerda pidió que "no se envíen flores. Ella siempre dijo que prefería que ese dinero no se gaste en flores sino que se dé a entidades benéficas".

También siguiendo los deseos de la artista, el cuerpo será cremado y sus cenizas serán esparcidas por las calles de Buenos Aires. (Télam)