Domingo 1 de Junio de 2003

  Música coral por el pueblo de Santa Fe
 

El Coro Universitario del Comahue realizará hoy la Misa Brevis de Giovanni Pierluigi da Palestrina. Será un concierto solidario con el fin de reunir elementos para los inundados.

  NEUQUEN (AN).- La dirección, en manos del maestro Daniel Costanza, del Coro Universitario del Comahue, siempre ha asegurado que el producto coral que el público tiene la posibilidad de reencontrar, es de jerarquía. Lo fundamentan años ininterrumpidos de mostrar obras cuya principal característica es la calidad. Por lo demás, esta institución es la de más larga historia y se encolumna entre los coros más importantes en su rubro del país. Pero hoy, sobre toda otra prioridad, la convocatoria tiene un valor agregado a lo artístico.
El concierto se realizará en el marco de las actividades que se vienen desarrollando para ayudar al pueblo de Santa Fe. Será este domingo en la Catedral de nuestra ciudad a las 20.30, una vez que haya finalizado la misa.
El director de la agrupación, maestro Costanza, de acuerdo con las necesidades inmediatas del pueblo santafesino, solicitó colaborar con artículos de higiene personal (jabones, dentífricos, cepillos de dientes, etc.) y productos desinfectantes (fundamentalmente lavandina, pervinox o similares). La colecta será entregada a Cáritas de Neuquén.
Respecto del programa que el público podrá apreciar, en compensación a su ayuda, se puede adelantar que la "Misa Brevis" está integrada por el Kyrie, Gloria, Credo, Sanctus, Benedictus, Agnus Dei I y Agnus Dei II.
El compositor Giovanni Pierluigi da Palestrina nació en Palestrina -de allí su nombre- en el límite de la Campania, campiña romana, probablemente en 1525 y murió en Roma en 1594. Fue el compositor más importante de la polifonía Renacentista, la edad de oro del contrapunto vocal sin acompañamiento. Compuso música sacra en su mayor parte y también un cierto número de madrigales. Es considerado el autor más destacado de la música coral a capella y antecesor inmediato de las misas y Pasiones de Bach y oratorios de Händel, acompañados por orquesta.
Con una vasta producción que incluye ciento cinco misas y doscientos cincuenta motetes, además de madrigales y otros géneros profanos, Palestrina se tornó el más célebre compositor de música sacra del siglo XVI y marcó, con su obra, la música polifónica del Renacimiento y de la Contra-Reforma. Es el mejor de todos los compositores del estilo coral polifónico de la Iglesia Católica Romana, según los críticos. "Sus líneas vocales largas y sinuosas parecen entrelazarse y colear hacia la iglesia, arrebatando la congregación entera para una atmósfera de oración. La belleza de la música es un placer garantizado aun para los no creyentes" se ha sostenido.
En 1566, los obispos y teólogos reunidos en el Concilio de Trento pretendieron alejar la música polifónica de las iglesias, en las cuales sería permitido solamente el canto gregoriano, pero fueron disuadidos después de oír la misa compuesta por Palestrina en homenaje al papa Marcelo II.
En sus últimos años se dedicó a la reestructuración del canto gregoriano, tradicional forma coral litúrgica.
   
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