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Viernes 30 de mayo de 2003 | ||
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Ahora colapsó el sistema cloacal de Bariloche | ||
La CEB reconoció que no se pueden realizar nuevas conexiones al servicio. |
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Las limitaciones de la red cloacal presentan una inquietante coincidencia con la distribución de gas natural, que también tiene su capacidad colmada y no puede incorporar usuarios nuevos mientras no se amplíe el gasoducto cordillerano. Las inversiones en el servicio de saneamiento arrastran un atraso considerable, al punto de que se necesitan casi 10,5 millones de pesos para poner al día el cronograma de obras previsto en el Plan Director. Tampoco el DPA ejerció en los últimos años una fiscalización efectiva, hasta que en los últimos meses comenzó a intimar a la Cooperativa para que concrete las inversiones postergadas. Las falencias en el sistema cloacal también preocuparon a la entidad ambientalista Comunidad del Limay, que hizo pública sus sospecha sobre un eventual interés político "que termine agravando el problema". Uno de los referentes de la entidad cuestionó que el intendente Alberto Icare y también el gobierno provincial estén propiciando la conexión de nuevos barrios al colector cloacal principal (el primero de ellos sería Pinar de Festa), a pesar de que el sistema está trabajando al límite de su capacidad. La insistencia en sumar nuevos usuarios al servicio tendría una obvia connotación electoral, pero pasaría por alto la necesidad de corregir antes el grave déficit estructural del sistema de saneamiento. La inversión más urgente sería la del colector Costanera, que tiene innumerables fisuras y cada vez que llueve vuelca líquidos crudos al lago. Para ampliar la capacidad del sistema también resulta imprescindible construir el segundo módulo de la planta depuradora. Cada una de estas obras tiene un costo que ronda los 4,1 millones de pesos. La propia CEB en su último comunicado a los usuarios se comprometió a "gestionar ante las autoridades provinciales y municipales la no aprobación de nuevas obras en el sistema cloacal, hasta tanto no se realicen las inversiones necesarias para adecuar la planta depuradora y las redes principales". El declaraciones recientes, el titular del DPA, Mario De Rege relativizó esas limitaciones, dando tácito aval para la conexión de los nuevos barrios aunque no esté reparado el colector Costanera. Esta laxitud contrasta, por ejemplo, con la nota que el 20 de marzo le envió el DPA a la CEB exigiéndole la ejecución de las obras faltantes. Allí emplazan también a la operadora para que evite "a la mayor brevedad los by-pass de líquido crudo al lago Nahuel Huapi", admitiendo que para lograr ese objetivo no sólo es necesario ampliar la planta depuradora sino "concretar la nueva cloaca máxima, ya que sin la inversión citada resulta imposible anular los desbordes de líquido crudo al arroyo Ñireco en épocas de lluvias". La Comunidad del Limay consideró que ese párrafo es "muy revelador", porque durante años "el DPA se negó a reconocer los derrames y tampoco ejerció una fiscalización efectiva". El vocero dijo que evalúan la posibilidad de formular una denuncia penal contra el organismo provincial por no haber controlado el cumplimiento del contrato. También consideran la hipótesis de que la provincia intente absorber el sistema de saneamiento (ante los graves problemas económicos de la CEB) para cederlo luego a otra empresa u operarlo por cuenta propia. |
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