El basural está ubicado al lado de una barranca que da al río Neuquén.

NEUQUEN (AN).- Cientos de bolsas con residuos de todo tipo se acumulan en un predio junto al río Neuquén, en el barrio Provincias Unidas, a 20 metros de algunas viviendas.
Desde hace meses las personas que viven en el lugar observan la llegada de automóviles de diferentes partes de la ciudad, que arrojan basura en el barrio.
Solamente una calle -la finalización de Islas Malvinas- separa el emplazamiento donde se acumula la basura, de las viviendas. Los vecinos que viven frente al terreno, comentaron que los desechos llegan a permanecer allí hasta un mes antes de ser recolectados.
"Viene un camión del Ejército y quema toda la basura. Pero para entonces los desechos se dispersaron por todo el barrio", dijo Sandra Sánchez, que vive a pocos metros del terreno.
El basural, por medio de una barranca, da al río Neuquén. Basta un poco de viento, para que decenas de bolsas se deslicen por la pendiente y caigan al agua.
El servicio de recolección en el barrio es normal, según comentaron los vecinos, pero hay sectores de difícil acceso donde el camión de la basura no puede entrar. Se trata de viviendas ubicadas junto a la orilla del río, que reportan una dificultad mayor para los recolectores.
Es por eso que los habitantes del algunos sectores del barrio también optarían por el predio para tirar su basura. "Aunque no en tanta cantidad como los autos que vienen a descargar", comentó Miguel Ybalo, otra de las personas del barrio.
A 200 metros del basurero, pueden encontrarse residuos propagados por la acción del viento y los perros. Hay desde restos de alimentos hasta chatarra.
"La principal preocupación son los chicos. Más allá de que cada tanto se lleven la basura, las bolsas son un foco infeccioso. Cuando salen a jugar, muchas veces se encuentran con bolsas en medio de la calle, o en la vereda de la casa", dijo otro de los vecinos.
La orilla del río que limita con el barrio, se prolonga por unos 300 metros. Y por toda esta extensión hay restos de basura a punto de caer al agua. Es difícil determinar el nivel de impacto de la basura una vez que llega al río y es arrastrada por la corriente. (AN)

Ensañamiento con los árboles

Cuatro olmos fueron dañados brutalmente hace dos días en el barrio Santa Catalina.
Una parte considerable de la corteza que recubre los troncos fue quitada con una herramienta punzante. Los árboles muestran ahora un espacio de más de 50 centímetros sin el recubrimiento vital que permite la circulación de la savia.
Los olmos agredidos se encuentran ubicados en la esquina de una casa deshabitada, en la intersección de las calles San Pablo y Tafí.
Las personas que viven cerca de donde fueron plantados los árboles, dijeron no haber visto quiénes se ocuparon de quitarles la corteza.
Expertos en botánica consultados por "Río Negro" dijeron que si bien el olmo es un árbol que podría tolerar el daño, no sería extraño que llegaran a secarse.
Raúl Palavesino, uno de los vecinos del lugar, dijo que los olmos tienen al menos 50 años, y que fueron de los primeros que se plantaron en el barrio. (AN)

Uno de los cruces más peligrosos en el oeste de la ciudad

La zona oeste de Neuquén presenta para los automovilistas uno de los cruces más peligrosos de la ciudad. Se trata de la intersección de las calles Doctor Ramón, Avenida del Trabajador, y Reconquista, a pocas cuadras del Hospital Heller de esta ciudad.
Pese a que se trata de tres arterias, el peligro es mayor porque son de doble circulación. Así, en el sector, confluyen en realidad seis carriles.
En el cruce no hay señalización ni semáforos pese a que son calles que trazan casi toda la ciudad de este a oeste.
Santiago Ripimán, cuya casa está frente al cruce, comentó que "a pesar de que son calles de tierra, los vehículos pasan muy rápido". Además aseguró que al peligro, se suma el ruido que provoca el paso de los automovilistas a gran velocidad. Dijo que es uno de los lugares que elige el tránsito pesado para llegar a la ruta 22.
Según Santiago, los automovilistas son los encargados de establecer las normas: "El que anda más rápido, es el que obtiene el derecho a pasar", dijo. (AN)