Caso de triquinosis en Neuquén

NEUQUEN (AN).- La detección oportuna de triquinosis en carne porcina salvó a una familia de contraer la enfermedad, que es incurable y puede llevar a la muerte. Pero no se pudo detectar el origen del animal, por lo que el municipio sospecha que pueden haber más chanchos infectados Las dudas orientan a los criaderos de la zona de la meseta, de Colonia Nueva Esperanza o de Valentina.

Hacia las zonas rurales se dirigieron los inspectores de zoonosis, para evitar la propagación de la enfermedad en otros animales y su transmisión a humanos.

El sector de Zoonosis de la municipalidad actuó ante la denuncia de una veterinaria privada, al obtener resultado positivo la muestra de cerdo que un particular le entregó para su análisis.

Cuando los inspectores llegaron a la casa del particular, les dijo que había facturado chorizos y que los había vendido a una carnicería para su comercialización al público El responsable del local comercial lo negó, en tanto que el personal municipal no encontró nada en las heladeras del local.

Los inspectores volvieron sobre sus pasos, y de la casa del particular rumbearon a la de su padre Allí encontraron al cerdo procesado en piezas y en facturas. Se llevaron la mercadería y la quemaron hasta quedar hechas cenizas Los inspectores tratan de encontrar a la persona que vendió el chancho ante el riesgo existente para la salud de las personas de haber otros infectados.