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Jueves 8 de mayo de 2003 | |
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Lanzan un novedoso plan para poner orden en la noche cipoleña |
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Intentarán que los padres de los adolescentes y jóvenes participen de operativos de prevención. |
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| CIPOLLETTI (AC) - La municipalidad y la policía acordaron ayer poner en práctica un novedoso sistema -más preventivo que represivo- para empezar a ponerle orden al ocio de los jóvenes en la noche cipoleña. Esta es la respuesta a la queja de la gente que vive en el centro, que hace más de un año que viene pidiendo que las autoridades ejerzan las funciones de inspección necesarias para evitar los ruidos molestos y los actos de vandalismo en las calles. A pesar del largo tiempo que lleva el reclamo, el municipio no tomaba hasta ahora cartas en el asunto. Quienes viven en el centro habían empezado a juntar firmas para un petitorio. El problema se agravó al punto de que en abril la policía detuvo a 80 adolescentes y jóvenes por contravenciones (faltas menores) tales como alcoholismo. El mes anterior había sido la mitad. En el centro de Cipolletti proliferó un tipo de bar que, en los hechos, hace las veces de pequeña discoteca. Para colmo, en cercanías a esos comercios los jóvenes orinan en plena calle o en las entradas de las casas. Es más: uno de los sitios elegidos por estos menesteres es el jardín del laboratorio donde hace casi un año fueron asesinadas tres mujeres, en la esquina de Roca y 25 de Mayo. El lugar tiene custodia policial. La idea a la que arribaron ayer fue la de hacer recorridas periódicas con participación ciudadana, incluidos los padres de los chicos que los fines de semana salen de noche, en el entendimiento de que de nada vale la presencia de la policía o los inspectores si en cada hogar no se hace docencia en materia de convivencia urbana. También se intensificará el control de la prohibición de venta de alcohol a menores de 18 años y después de las once de la noche. El área de inspección es una de las más deficitarias de la comuna, quizás porque el personal es demasiado escaso. De la reunión que ayer se realizó en el municipio participaron los jefes policiales de las tres comisarías de la ciudad, la jueza de Faltas Mónica Santos, los secretarios Fabián Gatti (Gobierno) y Jorge Rodríguez (Administración) y el responsable del sector de inspección, Jorge Bell. El abordaje de este problema no es fácil porque, si no se previene, pasa rápidamente de una actitud permisiva a una represión que ni la policía quiere. Gatti dijo a "Río Negro" que la solución de este problema requiere de un "contrato social" de los integrantes de la comunidad. Además, adelantó que, independientemente de ello, se les exigirá a los bares que, según las dimensiones, tengan entre uno y tres policías -en tareas adicionales-. El costo de este servicio correrá por cuenta de cada comercio. |
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