Tal actitud fue asumida ayer por el titular de ADEBA (Bancos nacionales), Jorge Brito; el presidente de ABA (Bancos extranjeros), Mario Vicens, y su par de ABAPPRA (Bancos públicos, privados y cooperativos de capital nacional), Carlos Heller, ante la denuncia de Kirchner de que un "grupito de bancos provinciales", quiere condicionar a la administración que asumirá el 25 de mayo.
Las acusaciones apuntaron de manera elíptica a Brito, titular del Banco Macro-Bansud y de varios bancos provinciales en el norte del país, a quien el ministro de Economía, Roberto Lavagna identifica afín al "menemismo".
Brito admitió que el presidente electo le hizo "una advertencia" a las corporaciones porque "no quiere ser presionado" durante su gestión y señaló que Kirchner genera "expectativas optimistas".
Al ser consultado por Jorge Lanata en el programa "Día D sobre si el presidente de la Asociación de Bancos Argentinos (ADEBA), Jorge Brito, pertenecía a las "corporaciones" que intentan influir en las decisiones del próximo gobierno, Kirchner respondió: "yo no lo voy a desmentir". "Por ahí usted tiene buena información, y yo no se la voy a desmentir".
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