Sábado 24 de mayo de 2003

  Controversia por la droga secuestrada en Zapala
 

El defensor de los detenidos dice que eran 4,7 kilos y la policía habló de 7,5

  ZAPALA (AZ)- El defensor oficial de los tres detenidos el jueves por el contrabando de marihuana en esta ciudad, Gabriel Rouret, desmintió ayer la información brindada desde la Policía Federal al asegurar que se secuestraron 4,7 kilos y no 7,5 como se afirmó oficialmente. Este hecho y otros "vicios técnicos" de la causa demoraron las indagatorias para el próximo lunes.
El hombre que transportó la droga desde Liniers hasta Zapala, Walter Padín, fue el único que alcanzó a ser indagado antes de la postergación, pero se mantuvo en silencio frente al juez por consejo de su letrado, Rouret.
En tanto, el taxista detenido en el procedimiento recuperó la libertad y confirmó que la droga tenía como destino la vivienda de Mayor Torres al 1600. Los involucrados podrían ser procesados por tráfico y tenencia de estupefacientes para su comercialización, penado con hasta 15 años de prisión.
"Es una desprolijidad muy grande de parte de la Policía, estuve en el pesaje y eran exactamente 4,750 kilos" enfatizó Rouret a "Río Negro". El defensor cuestionó el accionar de los efectivos, al tiempo que reconoció la presencia de otras irregularidades "técnico jurídicas" que originaron el retraso de las indagatorias para el lunes.
"Que digan lo que quieran, nosotros dimos una cifra estimativa de 7,5 kilos" replicó una alta fuente policial.
El jueves una investigación de la Policía Federal permitió desbaratar el ingreso a Zapala de una cantidad ahora indefinida de marihuana que llegó en un ómnibus de la empresa Chevallier proveniente de Buenos Aires. En un espectacular operativo, los efectivos al mando del comisario Daniel Battini interceptaron el cargamento y luego allanaron una vivienda.
El propietario del "aguantadero", identificado como José "El Astuto" Esparza, de 37 años, seguirá detenido en dependencias de Gendarmería Nacional. Debido a sus antecedentes por delitos vinculados con infracciones a la ley de drogas y robos, los investigadores venían siguiendo sus movimientos desde hace varias semanas.
Su esposa, Esther Maliqueo, también seguirá arrestada hasta tanto declare ante el juez Rubén Caro, lo que según su defensor podría ocurrir el lunes. Fuentes de la investigación le atribuyeron a Maliqueo el rol de coordinadora en el círculo delictivo montado para comercializar la marihuana.
"Me pararon en la calle y pidieron que los lleve a Mayor Torres al 1600" señaló el taxista que se vio involucrado en el episodio. Con esta afirmación se desvinculó de la causa.
Más allá de la suma secuestrada en poder de Esparza, -unos 1.000 pesos- los investigadores trabajan sobre otra pista acerca de los presuntos vínculos del hombre con el submundo de la droga. Tanto "El Astuto" como su esposa son desocupados, pero los elementos hallados por los investigadores en la vivienda que habitan no coinciden con esta situación.
   
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