El "Virrey" no sabe si irá Jerez o Rodríguez. El plantel viaja hoy al desierto de Calama.

Boca no confirmó el equipo porque aún tiene dudas sobre quiénes conformarán la línea defensiva.

La continuidad del juvenil Pablo Jerez como marcador lateral derecho o el retorno al primer equipo del zurdo Clemente Rodríguez en el sector izquierdo de la defensa es el dilema que aún no resolvió el entrenador de Boca, Carlos Bianchi, de cara al encuentro de mañana ante Cobreloa, de Chile, en el desierto de Calama, por los cuartos de final de la Copa Libertadores.
El resto del equipo será el mismo que venció por 4 a 2 a Paysandú, en la ciudad brasileña de Belem, es decir con Abbondanzieri; Jérez o Clemente Rodríguez, Burdisso, Schiavi y Crosa; Battaglia, Cascini y Cagna; Delgado, Guillermo Barros Schelotto y Tévez.
En el banco de suplentes estarían: Caballero, Jerez o Clemente Rodríguez, Calvo, Pinto, Villarreal, Estévez y Moreno.
En el entrenamiento realizado hoy en el complejo de Casa Amarilla, el plantel efectuó movimientos tácticos en grupo, pero Bianchi no dio pistas de la formación que saldrá al campo de juego del Cobreloa, ubicado a 2.250 metros sobre el nivel del mar.
Bianchi quedó conforme con el rendimiento de Juan Pablo Jerez en Brasil, aunque también pretende conservarle la titularidad a Clemente Rodríguez, ya que el lateral izquierdo fue expulsado en el partido de ida en la "Bombonera", y por eso no jugó el desquite ante los brasileños.
Si Bianchi se inclina por Jerez, volvería al tradicional esquema de 4-3-3, pero si lo hace por Clemente Rodríguez, el ex jugador de Los Andes actuaría por el sector izquierdo, ya que al Virrey no lo habría convencido la actuación que tuvo cuando jugó como marcador lateral derecho en la gira que hizo el seleccionado nacional por Centroamérica y los Estados Unidos.
Entonces, Nicolás Burdisso se correría al sector derecho y Rolando Schiavi y Diego Crosa completarían la línea de fondo. En el mediocampo, Bianchi ya no tiene dudas y jugará el mismo grupo de futbolistas que batió a Paysandú, y lo mismo pasará en el ataque.
El volante Ezequiel González, que se recupera de un desgarro en el muslo de su pierna derecha, no integrará la delegación, porque Bianchi considera que debe completar su recuperación física.
González se lesionó el 30 de marzo pasado cuando Boca le ganó en La Plata a Gimnasia y Esgrima, 2 a 0, por el torneo local y desde esa fecha no jugó, aunque sí lo hizo en reserva.
Después del pase a los cuartos de final, en Boca se vive un clima de gran tranquilidad, por lo que la institución decidió fletar un avión chárter hacia Calama para que viaje el plantel "xeneize".
El equipo, tras el entrenamiento matinal, abordará el avión a las 15 y como será un vuelo directo, llegará al desierto de Atacama a las 16.30 de Chile.
La delegación argentina quedará alojada en el hotel Park Calama, y tiene previsto retornar a esta ciudad luego de finalizado el partido, que se jugará a las 18.30 de Chile, en un estadio que estará colmado debido a la gran expectativa que existe por este trascendental cotejo.

"No vamos a especular"

El zaguero de Boca Juniors, Rolando Schiavi, dijo que el equipo xeneize "no irá a especular" a Chile, cuando juegue con el Cobreloa "porque para salir campeón hay que ganarles a todos".
"Boca va a jugar con las mismas ganas, con el mismo ímpetu que lo hizo en Brasil", expresó el defensor en declaraciones formuladas en el complejo de Casa Amarilla.
Schiavi retornará a Chile tras el mal momento que vivió el pasado 26 de febrero cuando al finalizar el partido que Boca le ganó a Colo Colo, por 2 a 1, debió ser internado de urgencia y operado de apendicitis.
Para el defensor el hecho de que Boca haya ganado dos partidos seguidos -a Colón, por el torneo local, y a Paysandú, por la Copa- "significa una gran tranquilidad".
El defensor dijo que no vio ningún video de cómo juega el Cobreloa, porque no ve "mucho fútbol por televisión" aunque recalcó que seguramente el técnico Carlos Bianchi ya habrá analizado al equipo chileno.
Cuando se le consultó si Boca supera el obstáculo de Cobreola y si Ríver hace lo propio con el América de Cali, deberán verse las caras en una semifinal, respondió que "por ahora, no pienso eso". (AR y Télam).

El "1" apuesta a la inteligencia

El arquero de Boca Juniors, Roberto Abbondanzieri, dijo ayer que para enfrentar al Cobreloa en Calama, ubicada a 2.250 metros sobre el nivel del mar "hay que actuar con inteligencia" para no sentir los efectos de la altura.
"Por supuesto que cuesta jugar en la altura, pero no hay que desesperarse, no es una cosa de locos. Hay que jugar en un ritmo que propongamos nosotros y no el rival. Si vamos a jugar alocadamente, seguramente, daremos nucha ventaja", expresó Abbondanazieri, en declaraciones formuladas en el complejo de Casa Amarilla.
Abbondanzieri reconoció que antes de jugar ante Paysandú, y luego de dos derrotas consecutivas -ante el propio elenco brasileño y Vélez, por el torneo local- "Boca había perdido un poco la confianza".
"Pero ya la recuperamos, y como Boca siempre estuvo vivo llegó el triunfo y ahora estamos muy entonados y con ganas de seguir en ganador en Chile, en un estadio difícil y ante un rival que tiene mucha experiencia", confesó.
Para el arquero xeneize "era lógico que hubiera críticas después de dos derrotas seguidas y mal funcionamiento del equipo, pero este grupo está unido y lo demostró en Brasil". (AR y Télam).