El cambio de vida de Gustavo Llull

Como tantos, partió a España. Ahora trabaja en "Operación Triunfo" como profesor de piano, dirige un coro y tiene un trío de tangos.

Gustavo Llull buscaba un cambio en su vida y lo encontró. Hoy hace música y trabaja en un exitoso programa de televisión en Barcelona.

CUTRAL CO (ACC).- "Operación Triunfo" es uno de los programas de la televisión de España, cuya versión local ya se puede ver en las pantallas argentinas, que logró romper récords de audiencia y venta de discos. Uno de los profesores que acompaña a los participantes durante el período de preparación de los temas es un argentino que está radicado desde el 2000 en España.
Gustavo Llull integra el equipo de profesores que debe orientar durante la semana a los participantes de Operación Triunfo en España en los temas asignados y que deben presentar en las galas. Aunque la segunda edición de OT ya culminó, Gustavo fue nuevamente convocado para la tercera parte que comenzará el próximo octubre.
Es profesor de Composición, formado en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional de La Plata, es oriundo de Puán en la provincia de Buenos Aires, y además cursó algunos años de Pedagogía Musical y Dirección Coral. Emigró en octubre de 2.000 a España como muchos argentinos, pero a diferencia del resto, "me fui buscando un cambio de vida. No solo laboral o económico, ese no fue el motor porque aquí tenía trabajo y estaba bien", dijo en diálogo con "Río Negro".
Así fue que se radicó primero en Sitges y luego hizo 40 kilómetros más y se instaló en Barcelona. De inmediato comenzó a buscar trabajo y además de repartir currículum por todos lados, aunque allí "resulta mucho el boca a boca, que una persona te recomiende a otra". Así fue que consiguió trabajo como pianista en el Centro de Estudio de la Voz e Interpretación y también en un restaurante dos horas por noche.
En esa escuela coincidió en algunos cursos con Nina, la directora de la Academia de Operación Triunfo, el programa que arrancó en 2001 cuando fue una verdadera explosión televisiva no sólo de rating en audiencia sino de venta de discos de los participantes ganadores. La directora lo convocó primero a trabajar en algunas cuestiones puntuales y luego le ofreció formar parte del equipo de entrenadores para la segunda edición de OT.
"Mi labor es hacer de pianista para acompañar a los chicos mientras preparan los temas y con los cuales compiten y vigilar lo musical. Esto es ver la afinación, la parte rítmica, el estilo y corregir todo el ámbito musical del tema y parte de interpretación", comentó a este diario.
Llull, cuyo apellido descubrió allí mismo que era de origen catalán, explicó que OT tiene todo el mecanismo perfectamente aceitado. Los 17 concursantes que logran ingresar a la academia reciben los temas a preparar los martes, los miércoles y jueves trabajan sobre ellos con los profesores, los sábados hacen las pruebas de micrófonos y allí es cuando deben estar musicalmente preparados. El domingo es la prueba en el "plató de televisión" como le llaman y el lunes ya es la gala.
"Al principio se hacen tríos o dúos. El primer tiempo es bastante trabajo porque si son tríos o dúos hay que armar las voces de cada tema porque a veces asignan una canción que canta un solista y hay que repartir las voces.
Es un trabajo de mucha dinámica porque los temas me llegan de un día para otro", agregó LLull que aunque le cuesta reconocerlo, tiene algún que otro acento español.
Esta parte es lo más difícil, "es una vorágine, es rapidísimo, no hay tiempo para hacer un proceso. Hay que ser más preciso, ver lo que no funciona y darle una respuesta y que salga bien y en cada tema. Mi intención es que vayan aprendiendo herramientas generales o básicas para abordar los siguientes temas. que se vaya haciendo el proceso de aprendizaje", afirma.
Este profesor, que se lo pudo ver el año pasado mientras asistía a los participantes, explica que "no dimensionó" la repercusión que tuvo el programa en España. "En parte lo hice a propósito porque es tan grande la movida. Es un programa tan famoso que todos saben, todo España ve OT y de golpe, de un día para otro que te reconozcan en la calle es fuerte", reconoce.
Aunque dice que prefiere ser de "perfil bajo" porque así puede focalizar el trabajo y no pensar en eso. Finalmente, este argentino, radicado en España sostiene que en ningún momento se sintió discriminado por ser latino. "Los catalanes por un lado, parecen fríos y cerrados pero en el fondo son muy tolerantes. Hay catalanes que son muy tradicionales pero son muy honestos y generosos", concluyó.

"Lo que sé y lo que me gusta"

CUTRAL CO (ACC).- El trabajo de profesor en OT de Gustavo Llull es el que llama más la atención, pero también es profesor en el Centro de Estudios de la Voz e Interpretación, donde se preparan actores y cantantes, y dirige un coro de adultos en Sitges.
Conforme y orgulloso de poder hacer "lo que sé y lo que me gusta" en el lugar que por ahora y no sabe por cuanto tiempo más eligió para vivir, Gustavo divide sus días entre su labor en OT y sus trabajos más formales. Acompaña en las clases de canto e interpretación en el Centro de Estudios de la Voz e Interpretación, dos días a la semana en Barcelona. Trabaja con grupos de edades diferentes.
Y por otra parte, es el director de un coro en Sitges, una pintoresca localidad ubicada a 40 kilómetros de Barcelona. "Hace un año que lo formamos, cuesta bastante es un grupo muy heterogéneo, de nacionalidades diversas, hay catalanes, americanos, alemanes, ingleses y también argentinos", comenta.
Y a lo largo del año también le surgen algunas ofertas como pianista para acompañar en cursos o dar clases particulares. Una de las mayores alegrías que recibió Llull el año pasado fue la convocatoria para trabajar en la dirección de un musical producido por la compañía Dagoll Dagom", reconocida por su trayectoria desde hace varios años en Barcelona. Este musical se llamó "Poe" en el que se enlazaban varios cuentos de Edgard Alan Poe. "Fue una gran responsabilidad y fue en catalán", agregó.

Siempre Astor

CUTRAL CO (ACC).- Gustavo Llull encontró la posibilidad de conformar además un trío con el que se presentarán en distintos lugares con un repertorio de música ciudadana. Los músicos interpretan los temas de Astor Piazzolla.
Gustavo logró conectarse en Barcelona con un amigo alemán que ejecuta el bandoneón, con quien se habían conocido cuando ambos estaban en La Plata. Empezaron a ensayar y luego se anexó un cordobés que toca el violín y empezaron a interpretar los tangos de Astor Piazzolla.
Debutaron en marzo pasado y ahora están trabajando en el repertorio. "Mantenemos el quinteto original de Piazzolla en la formación de trío. Tenemos proyectado incorporar una cantante que hace 15 años está radicada en Barcelona", comentó el músico. La música ciudadana tiene mucha aceptación en la región de Cataluña. "Hay catalanes mayores que fueron a ver a Carlos Gardel, por ejemplo. Hay una conexión muy fuerte con el tango y ahora esta oleada de argentinos que llevamos nuestra cultura está ayudando también", concluye.