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Miércoles 19 de marzo de 2003 | ||
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Huertas hogareñas para 450 familias maragatas |
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Lo cosechado asegura vitaminas y minerales en cantidad suficiente. Es un programa conjunto entre el INTA y el área Social de Nación. |
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Este ámbito de trabajo alcanza a 400 unidades productivas entre esta ciudad, Stroeder, San Blas y Cardenal Cagliero. Las huertas tienen carácter familiar, comunitarias y escolares. En las estaciones de primavera y verano se siembra choclo, zapallo, zanahoria y verduras de hoja; durante el resto de las estaciones se prueba con rabanitos, remolachas, cebollas y las verduras de hoja que no son afectadas por las bajas temperaturas. La promotora técnica del INTA-Patagones, Patricia Baffoni, explicó que el sistema funciona brindándole a la gente actividades de capacitación en los barrios, tras lo cual "se les entrega la semilla y se hacen supervisiones periódicas". Destacó que con este tipo de tareas "hay gente que está chocha, se siente bien porque notan que es un esfuerzo de ellos" y además "no siente como que es algo similar a la entrega de una dádiva". Baffoni aclaró que "el seguimiento prevé que a la gente que no siembre, se la excluya del plan para evitar la pérdida de la semilla; sin embargo antes de otorgarle la baja se le brinda una segunda oportunidad". Las huertas son una respuesta a la emergencia económica y la contención social que generó el desempleo y la pobreza, las familias producen sus alimentos en un reducido espacio que permite obtener hortalizas de hoja, raíces, frutos y legumbres que aseguran las vitaminas y minerales suficientes para una alimentación sana, según Fátima Cano de la Estación Experimental Agropecuaria de Hilario Ascasubi. Consideró que la determinación de promover huertas orgánicas se fundamentó en la certeza de que este modelo resultó el más apropiado y asimilable para las condiciones que enfrentan las familias carentes de recursos, y que son destinatarias del programa. A criterio de la especialista, la Huerta Orgánica es una herramienta natural, económica y sana para producir alimentos durante todo el año, agregando que se considera natural debido a que imitó los procesos de la naturaleza, económica porque maximizó la utilización de los recursos disponibles "propiciando así mayor autosuficiencia y sustentabilidad". En cuanto a la calificación de sana está relacionada con una actividad "libre de agrotóxicos". Para simplificar los sistemas de producción, el Pro Huerta organizó un modelo no lineal para representar la multiplicidad de vínculos entre el hombre y la naturaleza que se basó en aprovechar e incrementar la capacidad de descomposición y asimilación de los suelos para no agotar la tierra y facilitar la alimentación de las plantas. |
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