Martes 18 de marzo de 2003

 

Paso decisivo para asegurar continuidad al hogar del changarín

 

El Ejército de Salvación y el municipio de Bariloche formalizaron un convenio para brindar techo, comida y reinserción a hombres desamparados que no tienen ningún recurso propio.

  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- A casi 6 años de promulgada la ordenanza de creación del Hogar de Tránsito para changarines u hombres desamparados el Ejercito de Salvación y el intendente Alberto Icare formalizaron un convenio y asumieron el compromiso de atender y asistir a los changarines para su recuperación y reinserción social, aportando respectivamente, los medios humanos y económicos.
Para firmar el convenio viajó a Bariloche el jefe territorial del Ejercito de Salvación, coronel William Roberts, con jurisdicción en Argentina Paraguay y Uruguay, en compañía de los mayores Miguel Del Bello, Jorge Ferreyra y Juan Liebl, quienes cumplen importantes funciones en la centenaria organización internacional de servicios.
Tras el acto formal el intendente Icare agradeció a los responsables locales del E.S, Eduardo Nahuelfil y Susana Rivarola, "por la marcha del programa y por ocuparse de quienes nunca habían sido objeto de preocupación", y recordó que "en tiempos de dificultadas las ONG son la rueda de auxilio del Estado". Roberts, por su parte, manifestó su satisfacción por "la confianza mutua demostrada, que permitió que el programa avanzara, de manera independiente al convenio formal".
La demora en la firma del convenio no constituyó un obstáculo para los avances del programa de asistencia a los changarines, que comenzó a implementarse antes de la existencia de la ordenanza, con la modesta ambición de acercarles un plato de comida caliente y evitar que mueran por congelamiento en las calles de la ciudad o en los precarios refugios donde se cobijaban durante el invierno. Después, el municipio comenzó a involucrarse en el problema, cada vez con mayor compromiso. En marzo del 2000, apenas iniciado un riguroso otoño que anticipó lluvias y nevadas, había muerto congelado en la puerta de un hotel deshabitado otro changarín de una larga serie de muertes absurdas. Ese deceso impulsó a buscar una solución inmediata y el municipio dispuso que "La Casita", un edificio donde asisten a menores en conflicto con la ley o con adicciones, sirviera de refugio nocturno a los changarines con la asistencia de los voluntarios de Ejército de Salvación. Y durante el invierno de 2000 "La Casita" se convirtió cada noche en la casa del Changa, llegando a albergar a más de 20 desamparados, que dormían en colchones dispuestos en los pisos y debían retirarse cada mañana a las 8.
El logro más notable, sin duda, lo constituyó la cesión provisoria de una vivienda en el galpón donde funcionó la empresa "Dinara", porque permitió la implementación de un programa de contención y recuperación del changarín alcohólico.
   
    ® Copyright Río Negro Online - All rights reserved    
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación