Domingo 16 de marzo de 2003
 

La pesadilla de un jamaiquino que vivió en Roca

 

Shaun Smith estuvo en la zona por un programa de intercambio.Cuando residía aquí alguien con sus iniciales delinquió en Nueva York.Vive en esa ciudad y un informe le frena la posibilidad de trabajar.

 
Shaun Smith ("John" para muchos roquenses que lo conocieron) en 1995, cuando estaba de intercambio en la región.
ROCA (AR)-Un joven jamaiquino que vivió en esta ciudad entre 1994 y 1995, como parte de un programa de intercambio cultural, está atravesando por una verdadera pesadilla en Nueva York. Un delito cometido en esa ciudad por un menor de edad con sus mismas iniciales, en la época en que residía aquí, le frenó las posibilidades de conseguir un trabajo, aun cuando él no tiene nada que ver.
Esto motivó que volviera a contactarse con la zona para demostrar que por esa fecha estaba aquí y no pudo haber cometido ningún ilícito en aquella ciudad.
Shaun A. Smith, quien tiene hoy 26 años, se recibió de ingeniero electricista y con su flamante título a cuestas salió en busca de trabajo. Encontró la posibilidad de ingresar en un puesto acorde con sus aspiraciones, en una importante empresa de electricidad de Nueva York.
Sin embargo, cuando todo indicaba que el puesto era suyo, llegó a manos de sus posibles empleadores un informe judicial que derribó sus aspiraciones: en sus antecedentes figuraba que había cometido un delito el 19 setiembre de 1994, cuando era menor de edad, y por esa razón no lo tomarían para el cargo.
Quienes tenían el informe judicial hablaban de "un hecho criminal", cometido siendo menor de edad, lo que impedía conocer cuál era en realidad el delito que se le imputaba y sólo decía que el autor era "S.A. Smith", coincidencia que a partir de entonces se convirtió en una pesada carga para Shaun.
La noticia dejó perplejo a "John", el nombre con el que se hizo muy conocido entre los jóvenes de Roca, cuando llegó como parte del programa de intercambio AFS. Apeló a su pasaporte para demostrar que no estaba en Estados Unidos en 1994, pero no le sirvió.
La semana pasada llamó a quienes fueron sus "padres" temporarios en Roca, para que le consiguieran alguna certificación de que estaba aquí por aquella época. "La primera vez que llamó estaba aterrado. Le dije que presentara el pasaporte, que ahí estaban las fechas de entrada y salida del país, pero me dijo que lo había hecho y no le habían creído, que pensaban que el documento podía ser "trucho"", explicó a "Río Negro" Ingrid Fantón, la madre postiza que tuvo "John" aquí.
"Después volvió a llamar y ya estaba un poco más compuesto, pero igual seguía muy preocupado por todo lo que le estaba pasando", explicó la mujer.
El joven "llegó a Roca el 23 de julio de 1994. Traía puesto un piloto por todo abrigo. Venía de Jamaica, con 40 grados de media y se encontró con el frío del invierno aquí. Le regalamos un par de guantes, que después no se sacaba ni para comer", recordó la mujer sonriendo.
Dos semanas después de llegar a Roca, el 8 de agosto de 1994, John empezó a cursar en cuarto año en el Instituto Nuevo Siglo y al año siguiente, hasta el 7 de julio estuvo en quinto año. Con un color de piel negro-azulado, el joven jamaiquino pronto se hizo muy popular entre sus flamantes compañeros de colegio, con quienes compartió estudios y salidas.
"Es hijo de padres que se separaron cuándo él era muy chico. Los dos se fueron a vivir a Estados Unidos, aunque en lugares distintos y a él lo dejaron en Jamaica al cuidado de un tío y de la abuela de unos primos. La madre es una mujer muy bonita, que trabaja como modelo en una agencia de fotografías", comentó Ingrid Fantón.
"Acá vino directamente desde Jamaica y enseguida se hizo de un grupo grande de amigos. Es un chico muy bueno, muy querido. Cuando terminó el plazo del intercambio volvió a su país, aunque tenía intenciones de irse a Estados Unidos para estar cerca de sus padres, pero como ya era mayor de edad le pusieron muchas trabas para que entrara", explicó Ingrid.
"Siempre nos mantuvimos en contacto. El dice que se va a venir a vivir a la Argentina, porque aquí siempre lo trataron muy bien", relató.
John recién logró ingresar a Estados Unidos en diciembre de 1998, más de cuatro años después de la fecha en que otro "S.A. Smith" cometiera el delito que le impide, al menos por ahora, concretar sus aspiraciones laborales. Mientras tanto, la documentación que le enviaron desde Roca, certificando que en 1994/95 estaba aquí le abrió una nueva posibilidad. Ahora espera que una comprobación de las huellas dactilares le permita terminar con esta pesadilla.
   
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