Viernes 7 de marzo de 2003 | |||
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Nene de tres años murió carbonizado en Cipolletti |
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La víctima estaba durmiendo ayer a la tarde, cuando un incendio se inició en la habitación. La abuela y otra mujer estaban en el patio, pero no advirtieron las llamas. Nada pudieron hacer. |
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En el patio posterior estaba su abuela y otro familiar, pero se percataron de que había fuego en el dormitorio cuando les avisó una vecina. "Hay llamas, fijate rápido", le dijo desesperada y a los gritos la vecina Aurora Espinoza a la abuela de la criatura, Teresa Samponia, de 70 años. Pero ya era tarde. El humo y las llamas habían envuelto al chiquito, Israel Montesino, de tres años, y nada pudo hacerse. El trágico suceso se produjo en la casa de calle Brown 476, a cuatro cuadras de la avenida Alem, estimativamente entre las 18.45 y las 19. El tío de la víctima, Daniel Antiqueo, también vive en la casa y llegó casi junto Elizabeth, porque ambos estaban trabajando, en lugares distintos, cuando recibieron la infausta noticia. Se cree que el incendio comenzó en el dormitorio en el que se encontraba el chiquito, por causas que se desconocían hasta anoche, aunque se sospecha que el chico pudiera haber manipulado un velador, o algún cable suelto, provocando un cortocircuito. Cuando vieron salir humo y fuego de una de las ventanas que da a la calle Brown los vecinos llamaron a los bomberos, quienes acudieron rápido pero nada pudieron hacer, salvo impedir que el siniestro se expandiese a toda la vivienda. El chiquito tenía la mitad del cuerpo carbonizado, y -según lo que comentaban algunos expertos, pudo haberse desmayado por el humo y luego morir carbonizado. Anoche la mamá de la víctima y la abuela se hallaban internadas en el hospital, ambas en estado de shock por lo sucedido. Elizabeth tiene otra hija, Mariel, de 9 años, quien no se encontraba en la casa cuando se desató la tragedia. Además de cobrarse una vida, las llamas destruyeron mucho mobiliario, electrodomésticos y afectaron la estructura interna de la casa. "Salía mucho humo por la ventana del dormitorio. Pero no se escuchaba nada. Todos tratamos de ayudar pero ya el pibe estaba sin vida", comentó anoche Martiniano Sánchez, un hombre que pasó frente a la casa y ayudó en lo que pudo. Una vez que bomberos informó que había una víctima, llegó al lugar la Policía. Hasta avanzada la noche estuvo el cuerpito tirado en el dormitorio semidestruido y negro de humo por todas partes, porque en ese -y en otros ambientes- se realizaban pericias para determinar por qué comenzó el siniestro. Personal de Tránsito del municipio cortó la calle, y se hizo un vallado con cintas para impedir que la gente avance hacia la casa. Había mucha consternación, incertidumbre y dolor por lo ocurrido, ya que nadie hallaba una explicación coherente. A las 19, la abuela y una de sus hermanas se sentó en la mesa del patio y comenzaron a tomar unos mates. Habría sido poco después que empezó el fuego, y ninguna de las dos mujeres se percató. |
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