Domingo 9 de marzo de 2003 | |||
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Pronto será mucho más rápido cruzar la cordillera |
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Finalmente se experimentó una medida demanda desde hace años: un sistema integrado de control migratorio en Pino Hachado, que agiliza el paso de un país a otro. Todo resultó bien. |
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La prueba piloto, que se extendió durante toda la jornada, permitió reducir a la mitad el tiempo de espera de los turistas para completar los trámites. El objetivo final es instaurar este programa a corto plazo para potenciar el desarrollo de la región que en este verano triplicó su flujo de visitantes. La modalidad de trabajo, denominada "país sede, país de entrada", permitió agilizar notablemente el movimiento vehicular hacia Argentina y Chile evitando las habituales demoras que sufren tanto turistas y transportistas que utilizan este paso internacional. "El objetivo es analizar los resultados para luego evaluar en conjunto con las autoridades chilenas la alternativa de aplicar este sistema en forma permanente", sostuvo Juan Sluman, administrador de Aduanas de Neuquén. El funcionario recordó que la metodología ya se aplicó en los pasos fronterizos de Cardenal Samoré y Cristo Redentor. En este último caso se encuentra actualmente en vigencia para la modalidad de turistas y transporte de pasajeros. Ayer, quienes ingresaron a la Argentina a través de este paso no perdieron tiempo en la aduana de Liucura ya que directamente fueron derivados a Pino Hachado donde funcionarios de ambos países les requirieron la documentación necesaria. A la inversa sucedió con los que salieron del país que recién se detuvieron en Liucura para completar los trámites migratorios. "Solo se toma nota de los datos del vehículo y se informa al turista de la documentación que le será requerida en el próximo control para evitar inconvenientes", explicó el jefe del escuadrón 31 de Gendarmería de Las Lajas y coordinador del paso, comandante principal Antonio Arce. En consonancia con el trabajo mancomunado entre los controles aduaneros de ambos países también se sumó la presencia de técnicos del Senasa de Argentina y el Servicio Agroalimentario Ganadero de Chile quienes controlaron el ingreso de productos de origen animal y vegetal hacia ambos países. Solo en Pino Hachado, ayer se incautó de una importante cantidad de mercadería que posteriormente será destruida. "Todo parte de un desconocimiento de la gente sobre los productos que no están habilitados para ingresar", advirtió Carlos Prio, representante regional del Senasa. Una de las principales metas que persigue el acuerdo rubricado a través de las cancillerías es dotar al paso de una herramienta clave para su desarrollo. Las cifras del flujo turístico se triplicaron este verano con referencia a años anteriores lo cual generó un mayor interés por la zona. Asimismo, las remodeladas instalaciones de la aduana argentina donde la informatización contribuyó a mejorar la atención al visitante es otra de las cartas que juegan a favor de una eventual aplicación del sistema integrado de control. Anoche, al cierre de la experiencia, las autoridades elaboraron un documento conjunto donde volcaron todos los datos de la jornada. Sobre esta base se trabajará para corregir errores y pulir un esquema de trabajo que podría aplicarse en forma permanente en el corto plazo. |
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