Viernes 7 de marzo de 2003
 

"Los deudores deben esperar otra sentencia", aclaró Nazareno

 

Duhalde no habló del tema, pero no pedirá la nulidad del fallo por San Luis.El martes próximo el máximo tribunal podría expedirse en el caso de una ahorrista.

 
Nazareno, oculto durante los cacerolazos contra la Corte, ayer lanzó encendidos elogios al fallo sobre el caso San Luis.
El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Julio Nazareno salió a afirmar 24 horas después del fallo redolarizador que benefició a San Luis que el máximo tribunal "no negoció jamás con nadie" su pronunciamiento contra la pesificación de depósitos en dólares y explicó que los deudores del sistema bancario aún deben esperar otra sentencia.
Pese a los dichos de Nazareno, las organizaciones que nuclean a los deudores pidieron que se ratifique el alcance del fallo. Pretenden así que, a través de una acción declarativa de certeza, la Corte deje en claro que la sentencia conocida el miércoles se aplique "única y exclusivamente respecto del artículo segundo del decreto 214/02", es decir a los depositantes. (Ver "Deudores")
Desde el Gobierno, lo más llamativo fue el segundo día de silencio del presidente Duhalde sobre el tema. Tampoco ha emitido mensaje alguno sobre otro hecho que afecta a su gestión: el escándalo que genero Luis Barrionuevo en Catamarca. (Ver pág 5)
De todos modos, fuentes cercanas al jefe de Estado dejaron en claro que no es atribución del gobierno pedir la nulidad del fallo de la Corte Suprema planteado por los jueces de la minoría del máximo tribunal e insistieron en que la sentencia "no significa la redolarización" de todos los depósitos bancarios. (Ver "Escándalo")
La interpretación fue hecha por una fuente oficial, que dijo que, a pesar de todo, el fallo "no fue tan dañino" como se había especulado inicialmente.
Ahora, todo el temor del gobierno se trasladará al próximo martes ya que el máximo tribunal podría expedirse sobre el "caso Beratz" y sentaría así jurisprudencia para los ahorristas.
Los temores por eventuales consecuencias sobre la liquidez bancaria que abrió el fallo sobre San Luis generaron ayer una caída en la cotización bursátil de las acciones de las entidades financieras. Este fue el rasgo más saliente de una jornada en la cual, el presidente del más alto tribunal del país, Julio Nazareno, ensayó una defensa enfática de la sentencia, a la vez que el gobierno salió a poner paños fríos.
La baja en las acciones de los bancos se vio reflejada sobre la plaza local como asimismo en la bolsa madrileña donde cotizan los papeles de entidades que poseen filiales en la Argentina.
En la bolsa porteña las acciones de los bancos cayeron entre el 5 y el 6 por ciento, mientras que en España los papeles bajaron entre el 1,5 y el 3,2 por ciento.
Nazareno sostuvo que el máximo tribunal "no negoció" el fallo dictado el miércoles y lo definió como "considerado" y "meduloso".
Explicó, por otra parte, que los deudores del sistema bancario deberán aguardar una sentencia de la Corte que fije jurisprudencia en la materia, ya que el fallo contra la pesificación no tendría una incidencia directa sobre los contratos de mutuo en moneda estadounidense.
"Sobre los deudores, veremos cuando la Corte tenga que resolver sobre ese tema". Dijo que "nuestra meta, con nuestro fallo, es que se respete la Constitución" Nacional, que para la mayoría en la Corte fue vulnerada a través del decreto 214, mediante el cual el Gobierno de Eduardo Duhalde reprogramó y pesificó las imposiciones en dólares.
El supremo tribunal, por cinco votos contra tres y la excusación del juez Enrique Petracchi, declaró el miércoles la inconstitucionalidad de la pesificación, en el marco de un pleito iniciado contra el Estado Nacional por la provincia de San Luis, dueña de depósitos por casi 248 millones de dólares.
Con esa resolución, la Corte estableció un criterio que regirá en todos los juicios contra la pesificación de depósitos. Y se presume a partir de la semana próxima el tribunal avanzará en otras causas promovidas por ahorristas.
Ayer Nazareno rechazó toda influencia del poder político en la decisión del tribunal y se quejó por el "mote" de "mayoría automática" con que ha sido bautizada la voluntad que se impone en buena parte de las resoluciones del cuerpo.
"La mayoría automática es un mote que no se de dónde lo sacan. Yo no soy automático de nadie", se defendió el juez. Y dijo que el fallo en favor de San Luis "ha sido bastante considerado, bastante meduloso. Estamos satisfechos".
Por otra parte, definió como "una zoncera" la recusación que presentó el miércoles el Banco Nación para apartar al juez Carlos Fayt de la causa debido a que es dueño de depósitos ya canjeados por bonos.

"Gravísimo precedente"

La presidente de la Asociación de Deudores Argentinos, Hilda Gumprich, consideró que el fallo de la Corte Suprema de Justicia, que redolarizó depósitos de la provincia de San Luis, implica un "gravísimo precedente" para los deudores privados, ya que "sienta jurisprudencia" sobre las moras.
Si bien la decisión judicial se circunscribe al reclamo de San Luis y no especifica nada acerca de los créditos hipotecarios y prendarios, Gumprich no descartó que la medida se extienda a los deudores.
"Lamentablemente vivimos en un país donde lo de hoy, mañana ya no es. Habíamos logrado que no se cobrara el CER -en las deudas hipotecarias de hasta cien mil pesos- y un buen día se vetó", dijo la deudora.
En ese sentido, aseguró que "hay una pulseada muy grande" en los bancos para que también se redolaricen las deudas y sostuvo que el sector financiero "sigue avanzando" en ese sentido.
"Son 14 meses de una lucha en la que no se ve la luz en el caso del deudor privado, donde no hay una reglamentación, y donde todos los casos se dirimen en la Justicia. Eso trae aparejado pagar tasa de Justicia y pagar gasto de abogados, la situación no es para nada clara y esto ha sido la frutilla del postre", lamentó Gumprich.
Aseguró, además, que "se le mintió a la gente" sobre la situación de las entidades financieras, al recordar que mientras "se decía que los bancos no podían devolver dólares porque los deudores devolvíamos pesos", según datos del Banco Central los deudores "cumplían en un 89,77 por ciento" en diciembre de 2001 con el pago de las cuotas en la moneda estadounidense. "Después servimos como carne de cañón para que digan esto, pero ya se habían llevado 26.200 millones", añadió. (Télam)

   
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