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Viernes 14 de marzo de 2003 | ||
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Un testigo reconoció al presunto asesino de Lecuna |
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Hasta ahora tenía identidad reservada y acusó al procesado Oscar Barros. El imputado que manejaba la Trafic le pidió perdón a Georgina Barbarossa. |
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Julio Lucero, quien hasta ahora figuraba en el expediente del caso como testigo de identidad reservada, señaló ayer al detenido Oscar Barros como supuesto homicida de Lecuna, asesinado del 2 de noviembre de 2001. Frente al Tribunal Oral que ayer abrió el debate por el crimen, Lucero contó que "supe en mi barrio" que el presunto asesino bajó de una camioneta Trafic, abordó un taxi marca Renault 19 en el que viajaba la víctima y le disparó. "¿Cuál es el apellido de esa persona?", preguntó el Tribunal, y el testigo respondió, mientras señalaba a Barros: "No lo sé, pero es ese que está sentado ahí". Lucero explicó que Barros "tiene familiares en el barrio donde vivo" y que, por terceros, se enteró de que la víctima era "el Vasco" Lecuna, es decir, el marido de Barbarossa. El testigo es taxista y respondió que el uso de armas no es habitual en los asaltos a vehículos de alquiler: "Esta forma de robar no es común. Rompieron los códigos", indicó. Wálter Jorge, dueño de la camioneta Trafic de la que habrían bajado los delincuentes que atentaron contra Lecuna, también declaró ante el tribunal, acusado como partícipe del crimen. Tras la indagatoria, se acercó a Barbarossa y le dijo: "Lo siento". "Es fuerte estar delante de los que, se supone, son los asesinos. No es agradable que te cuenten con detalles cómo asesinaron a tu marido", sostuvo Barbarossa frente a la prensa, el término de la audiencia. El debate se reanudará hoy al mediodía. Antonio Arregui, dueño del taxi y también imputado en la causa, dijo que nunca imaginó que el vehículo que rentó iba a ser utilizado para un crimen. Luego del ataque, Lecuna quedó herido en plena calle hasta que lo recogió una ambulancia y lo trasladó al Hospital Rivadavia, donde finalmente murió. Ayer debía declarar Barbarossa pero finalmente el tribunal desistió de interrogarla. El juicio es sustanciado por el Tribunal Oral 2, integrado por los jueces Silvia Mora, Alejandro Martín Becerra y Hugo Boano, que convocaron para hoy a testigos oculares. Ayer también declararon otros vecinos del barrio de Palermo que detallaron cómo fue el asalto y posterior muerte. Dentro de las declaraciones relevantes que se aguardan la semana próxima está la del conductor del taxi, Ernesto Gabriel Gómez, y Juan Carlos Schmitt, otro de los acusados por el homicidio. Tanto Schmitt como Barros están imputados por el delito de homicidio en ocasión de robo. Ayer, Arregui se manifestó ajeno al crimen y denunció haber sido amenazado. De su relato se desprendió que prestó el taxi a Gabriel Gómez -otro de los imputados- sin saber que con él se planeaba cometer un crimen, aunque sí admitió saber que "iban a usar el coche para robar plata". Arregui recordó que cuando le fue devuelto el taxi y halló manchas de sangre en el interior, recibió de labios de otro de los imputados, Barros, la advertencia: "cerrá bien la boquita porque tu familia es boleta". |
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