Lunes 3 de marzo de 2003

 

Buenas perspectivas para las uvas de la región

 

Las condiciones meteorológicas favorecieron el desarrollo de una temporada en la que la calidad de la viticultura muestra excelentes niveles. La cosecha de uvas blancas fue exitosa y las tintas van por el mismo camino.

  ALLEN (AA)- Una temporada con muy buenos parámetros de calidad se avizora para la viticultura en la región. A partir del inicio de la cosecha de algunas de las principales variedades de uvas blancas, se prevé una producción de "excelente calidad" debido a las bondades que el clima acarreó para esta actividad en la zona del Alto Valle.
Desde la Estación Experimental Agropecuaria del INTA el experto en la materia, Alcides Llorente, trazó un alentador panorama sanitario para el sector en torno de los relevamientos y observaciones de viñedos efectuados hasta el momento.
El técnico del área Viticultura, graficó tal situación para las uvas blancas y también aseguró un similar pronóstico en el caso de las tintas, para las que se prevé en este mes que comienza condiciones meteorológicas que favorecerán una buena maduración.
Según se explicó desde el organismo agropecuario, el clima evidenciado durante la etapa de producción "fue óptimo" para los viñedos y la sequedad impidió la proliferación de hongos en las plantas.
Desde la última semana las variedades sauvignon blanc y semillón comenzaron a ser cosechadas en distintos puntos de la zona, se indicó, y en esta semana se iniciará el levantamiento de la uva chardonnay.
"Las variedades blancas han madurado muy bien, principalmente sauvignon y semillón, y faltaría chardonnay que es importante. También tiene muy buena calidad y no ha sufrido tanto los calores que hemos tenido durante el mes de febrero", comentó Llorente.
En relación con las uvas tintas, el técnico explicó que "es de esperar que en el mes de marzo haya una baja de temperatura y se produzcan las diferencias térmicas entre el día y la noche, la amplitud térmica que nosotros llamamos, y las variedades tintas van a madurar muy bien".
Si bien los niveles de producción vitícola en la región del Alto Valle de Río Negro y Neuquén aún no cobran mayor importancia, el contraste lo brinda la calidad que desarrollan las viñas en la zona y que "se refleja en los buenos vinos que se producen", se destacó.
Particularmente en esta temporada, Llorente calificó a la sanidad de los cultivos como "perfecta", según dijo, porque "no ha habido prácticamente ningún desarrollo de hongos, como consecuencia de la falta de humedad". Tal vez "el viento pudo haber influido en una menor cantidad, porque el cuaje en muchos casos no ha sido bueno. Pero el tener este clima tan seco y con viento para nosotros es bueno porque lleva las tormentas hacia otro lado, y no hay aportes de humedad. Y este año ha sido más seco que otros, entonces quiere decir que la calidad es excepcional", sostuvo el ingeniero agrónomo.
Este particular parámetro "permite diferenciar la temporada de otras anteriores, si bien en general no tenemos problemas sanitarios", precisó, y permite asegurar el ingreso de las uvas de la región a los mercados del exterior. Los principales destinos para la producción local están conformados por Estados Unidos, Inglaterra, algunos países latinoamericanos y también se están haciendo experiencias con algunos países asiáticos, manifestó Llorente, aunque "el inglés se está haciendo muy importante para la Argen- tina", finalizó.

Producir calidad, no cantidad

ALLEN (AA).- "En la zona tenemos condiciones para producir calidad. Para cantidad se lo dejaremos a otras provincias, Mendoza o San Juan, pero a nosotros el clima nos permite cultivar sólo ciertas variedades que son de óptima calidad, que tienen un ciclo vegetativo no muy largo y maduran bien", opinó Alcides Llorente.
Desde el período 1999-2000 el crecimiento en la viticultura ha sido progresivo en el Valle, pero "creo que recién ahora los empresarios, principalmente gente de Neuquén, se están dando cuenta de las condiciones de la región para producir vi- nos de calidad". Por tal razón desde los últimos años se están implantando variedades de muy buen comportamiento como malbec, merlot, cabernet sauvignon -en tintas- y sauvignon, chardonnay, semillón -en blancas-, dijo el técnico, "que son las variedades que el mercado exige".
Según informó el ingeniero del INTA, en el "99 en Neuquén "había poco más de 100 hectáreas, en el 2000 unas 300, en 2001 unas 600 y en el 2002 creció en alrededor de 1.000 hectáreas". Y este año la cifra se incrementará en alrededor de 600, estimó Llorente, en base a un informe que realizó recientemente. En tanto en Río Negro, la cantidad de viñedos implantados es inferior, "en los últimos 4 años se habrán puesto unas 400 hectáreas", indicó.

   
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