Jueves 6 de marzo de 2003

 

El clásico de Avellaneda se traslada a Mar del Plata

 

El Comité Nacional de Seguridad decidió ayer el sorpresivo cambio de escenario para el partido.

  BUENOS AIRES (DyN).- El Comité Nacional de Seguridad, dependiente del Ministerio del Interior, resolvió trasladar a Mar del Plata el clásico de Avellaneda entre Independiente y Rácing programado para el domingo por la cuarta fecha del torneo Clausura de fútbol.
La decisión generó sorpresa y hasta motivó algunas reuniones.
Anoche la AFA dispuso acatar la controversial determinación y programó que el encuentro se disputará el domingo a las 16, pero con la variante de que no será televisado, y en su lugar irá en directo el de Ríver y Chacarita.
Luego de casi tres horas de reunión, el comité dictaminó por cuatro votos contra uno de la AFA que el escenario del trascendental partido tenga lugar en la provincia de Buenos Aires y que, en ese marco, el único que brindaba la seguridad requerida era el "José María Minella" de Mar del Plata.
El presidente del comité provincial de Seguridad Deportiva, Mario Gallina, comentó que no pudo prosperar otra alternativa de escenario más cercano debido a la rotunda negativa de la Policía Federal a hacerse cargo de la seguridad de un encuentro calificado de muy alto riesgo por nefastos antecedentes de violencia.
Independiente tuvo que resignar la localía debido a que su estadio se encuentra suspendido por acumulación de amonestaciones en el pasado Apertura, donde se consagró campeón.
La drástica e inflexible postura de la policía impidió que el cotejo pudiera jugarse en estadios seguros y amplios como son los de Ríver Plate, Vélez Sársfield o San Lorenzo de Almagro.
El otro estadio disponible en jurisdicción bonaerense era el de Lanús, que fue descartado de inmediato. Sin embargo, en la AFA se manejó una alternativa que parecía terminar con la indefinición. Rácing aceptó que el partido se jugara en Independiente y que la última fecha de suspensión que le resta a la entidad "roja" fuera cumplido en el siguiente compromiso de local ante Vélez.
Gallina manifestó que el comité nacional señaló que existe un impedimento de índole legal y definitivamente irreversible para dar lugar a ese cambio.
Lo que llamó la atención es que cinco meses atrás, y porque era Rácing el que tenía su estadio suspendido, el clásico de Avellaneda se disputó en el estadio "Monumental" de Ríver sin que se registraran incidentes, lo que suponía un antecedente de enor-me valía para repetirlo.
De allí que se conjeturara que detrás del fallo podía haber razones o presiones políticas derivadas del conocido enfrentamiento entre el jefe de gobierno y la Federal con Mario Gallina.
Esto fue expresado por el presidente de Independiente, Andrés Ducatenzeiler, quien lanzó durísimas críticas contra el jefe de gobierno porteño Aníbal Ibarra en particular y la dirigencia política en general, considerando la medida como "una clara persecución" contra su club.
"Sufrimos una doble sanción, de un costo económico impensado e irrealizable. Aníbal Ibarra es muy bueno para pedir votos pero luego se caga en la gente. Los argentinos estamos acostumbrados al maltrato. Esto es una cuestión de locos, vivimos en un país de locos", disparó.

El presidente de los "rojos" pegó muy duro

El presidente de Independiente, Andrés Ducatenzeiler, advirtió ano-che que la ruta 2, por la que habitualmente se llega de Buenos Aires a Mar del Plata, "se va a convertir en una selva de ida y vuelta y yo lo único que puedo expresarle a los hinchas de Independiente es que Dios los ayude".
"Rácing salió campeón en cancha de Vélez en un partido en el que se armó un estado de sitio y ahora resulta que hay que irse a jugar a Mar del Plata porque Aníbal Ibarra quiere cuidar que no le pase nada antes de terminar su mandato. Esta es una decisión política porque la capital tiene un problema con Mario Gallina que lo tendría que dirimir en el Congreso. No hay un ministro del interior en éste país?. ¿El presidente Duhalde no puede resolver esto?, apuntó.
José Lemme, representante de AFA en el comité de seguridad, comentó que "la negativa total de la Policía Federal" le "llamó poderosamente la atención" y añadió que la determinación implica "una falta de respeto total y sin ningún justificativo contra el fútbol y la gente".
"¿Y si llueve y se suspende, que hacemos con las cuarenta mil personas que irán a Mar del Plata? El fútbol está dando una demostración de racionalidad y la irracionalidad viene de la política", concluyó Ducatenzeiler.
Por último, el gerenciador de Rácing, Fernando Marín, comentó que si bien le sorprendió la medida, "simplemente debemos acatarla aunque se produzca perjuicio económico para los dos clubes. Los que hicieron esto saben más de seguridad que los dirigentes". (AR y DyN).

   
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