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Sábado 1 de marzo de 2003 | |
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"Antígona Vélez", en la plaza San Martín de Roca |
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Historias bajo cero |
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| Hoy se cumplen 35 años del estreno en nuestra ciudad de la obra que, sobre la base de la tragedia "Antígona" de Sófocles, escribió nuestro Leopoldo Marechal. La tan ambiciosa como inédita empresa, sin precedentes en la Patagonia, despertó infrecuente interés en el público valletano. Consignemos también que el comentario del acontecimiento fue la primera nota crítica que hicimos como periodista de este diario. Para recuerdos y merecimientos, extraemos algunos párrafos de aquella nota: "La expectativa suscitada por el anunciado estreno de "Antígona Vélez", precedida por controversias y polémicas desde variados ángulos, hizo que un público numerosísimo se congregara en la plaza San Martín de esta ciudad, tanto el viernes como el sábado en que se efectuó la segunda presentación, por el elenco de la escuela de Arte Dramático, dependiente de la municipalidad de General Roca, bajo la dirección de Enrique Ryma, con el auspicio de la subsecretaría de Cultura de la Nación y del Fondo Nacional de las Artes". Y Agregábamos: "Sófocles, el más perfecto de los griegos, concibió en sus inmortales tragedias la de Antígona hija de Edipo y Yocasta. De la unión incestuosa nacen cuatro hijos: Antígona, Ismena, Teocles y Polinices. Creonte impide esparcir el polvo ritual sobre el cadáver de Polinices, por considerarlo traidor. Pero Antígona carga con la muerte, arrastrando sin quererlo a su amado Hemón, hijo de aquél, la osadía de cumplir con su deber de hermana al honrar el cadáver de Polinices. Antígona es la piedad fraternal exaltada al heroísmo". Esta línea dramática tentó hace años a Leopoldo Marechal a recrear la inmortal creación, ambientándola en nuestras pampas y más precisamente en la época de las campañas contra el indio. Leopoldo Marechal es esencialmente un novelista argentino. Entre su escasa producción teatral se encuentra ésta en la que es fácil advertir su origen, con predominio de lo literario (lenguaje lujoso, rico en metáforas) sobre lo eminentemente teatral. De cualquier manera, los factores más o menos folclóricos relacionados con la zona, que contiene la obra, indudablemente, determinaron su elección. Ello hace que ahí resida su principal mérito; limitado en lo demás a una transcripción bastante lineal y esquemática de la tragedia griega, en la que, lógicamente, se advierte la mano de un poeta. Justo es señalar que "Antígona Vélez" es un vehículo expresivo para que un hombre de teatro, como Enrique Ryma, que conoce su oficio, logre este resultado. Queda dicho que es muy bueno el movimiento escénico que aprovechó todas las posibilidades dadas por el hermoso marco diseñado por Luis D"Ansó, con un sentido funcional y en un tono marcadamente realista. El vasto reparto, integrado totalmente por algunos de la Escuela Municipal de Arte Dramático, cumplió una labor disciplinada y homogénea si se tiene en cuenta el paso de una corta experiencia en salones cubiertos, a ésta, muy difícil, al aire libre. Por otro lado, las breves intervenciones dan lugar a una apreciación sólo de conjunto. No obstante, asoman ya la veteranía de Jorge Hernández; expresivo Osvaldo Distéfano; seguro, Omar González en muy grata intervención. Clotilde Distéfano, breve pero muy oportuna en el papel de la hermana de la protagonista, y Claudio Di Roco en un rol episódico. La labor de Angel Suárez, segura y desenvuelta. En cuanto al personaje de Antígona, tal como se anunció, se alternaron dos actrices. La noche del estreno lo jugó Yolanda Valentina. "No puede dejar de señalarse la labor que cumplió, en un tono general sumamente acertado: excelente dicción, elegante, correcta en todo momento; intensa y sobriamente trágica, en otros". No menos ponderable recordamos la actuación de Irene Martínez Fabi, muy cerca del torturado acento que el interior del personaje de la pieza requiere; agregó marcada hondura dramática a su labor. "Las breves intervenciones del Coro de Cipolletti, bajo la dirección de Miguel Angel Barcos, subrayan el texto dramático con propiedad; demuestran excelente ajuste. Además están muy bien seleccionados los textos musicales. Muy buena la guitarra de Ramón Alcaraz y los golpes de timbal que contribuyeron a la creación del clima de tragedia que la obra requiere". La idea e instrumentación de la iniciativa fue de Marcela Darrieux, directora de Cultura de la Municipalidad de General Roca durante la intendencia del ingeniero Próspero Saint Martin. Junto con otras importantes acciones culturales llevadas a cabo por la Darrieux en la región, ésta, por muchos motivos, memorable, lleva su impronta. El oro para ella. Jose Manuel García |
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