Miércoles 12 de febrero de 2003

 

Bariloche sigue siendo ideal para turistas chilenos

 

A pesar de las variaciones cambiarias, este mes se acentuó la llegada de trasandinos. La principal ventaja que destacan es el costo del alojamiento y la gastronomía.

 
Las calles se inundaron de vehículos con patentes del país vecino, que hasta son "perdonados" en las infracciones.
SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Pese a que en las últimas semanas el peso chileno se depreció frente al dólar, y éste ante el peso argentino, a los chilenos todavía les conviene veranear en Bariloche. Los visitantes encuentran conveniente el precio de los alojamientos y las comidas, pero aseguran que ya no les favorece venir de compras, como ocurría al comienzo del año pasado.
Desde el comienzo del verano, pero mucho más desde el inicio de febrero, modernos vehículos con patentes blancas y letras y números negros circulan por la ciudad y se estacionan en sus calles.
Al mismo tiempo, abundan en las veredas y comercios los modismos trasandinos, y a nadie sorprende escuchar frases como "hace harto calor", o palabras como "gasolina", poco usuales en el léxico cotidiano de este lado de la Cordillera.
Frente a esa realidad y convencidos de las ventajas que generará esa corriente turística, los barilochenses y sus autoridades consienten algunas faltas, generalmente las relacionadas con las normas de tránsito vigentes en Argentina.
Desde Valdivia llegó Carlos con su familia, integrada también por Carmen, su suegra, que nació y reside en la ciudad de Ancud, en la isla Grande de Chiloé, frente a las costas del océano Pacífico. Para ellos, que no conocían Bariloche, todo es una agradable sorpresa, comenzando por las bellezas naturales de la ciudad y su entorno, que se completa con los precios favorables.
"La hotelería y la comida es buena y mucho más barata que en Chile", aseguró Carlos, pero Carmen relativizó las ventajas afirmando que "el vestuario cuesta lo mismo que en Chile, y el calzado está más caro todavía".
Lilian y su esposo se desempeñan como bioquímicos en un importante laboratorio farmacéutico de Concepción, y llegaron a Bariloche por el paso Cardenal Samoré. Ayer por la tarde buscaban información sobre alojamientos en la oficina de Turismo del municipio, pero en realidad ya habían intercambiado datos en el paso fronterizo con familias que regresaban a Chile.
"Eso nos tranquilizó, porque en el sur de Chile todo es carísimo, y creímos que en Bariloche podría pasar lo mismo", comentó la turista, que ya había experimentado satisfacción al considerar que habían pagado un precio justo por el almuerzo, pero estaba preocupada por la seguridad de su vehículo.
Mario, de Santiago de Chile, coincidió en lo esencial, pero aclaró que en la cabaña que alquilaba en los Kilómetros le cobraban lo mismo que había pagado en Licanray, al norte de Valdivia.
"La comida está algo más barata, pero las ropas cuestan lo mismo que en Santiago", agregó, y por último deslizó una queja contra la oficina de Turismo, al señalar que "la niña que nos atendió no supo explicarme si al haber ingresado por el paso Samoré podría cruzar a Chile por otro lugar".
   
    ® Copyright Río Negro Online - All rights reserved    
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación