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Sábado 1 de febrero de 2003 | |
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Turista golpeado al reclamar por la falta de agua en su alojamiento |
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Ocurrió en Las Grutas. El matrimonio cordobés abandonó la villa muy ofendido tras radicar la denuncia policial |
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| LAS GRUTAS (ASA) - Una familia de turistas cordobeses se fue ofendida y maltratada de esta villa luego de radicar la denuncia policial por la agresión propinada por el dueño del lugar donde estaban alojados a raíz de un simple reclamo por la falta de agua que sufrieron durante toda la tarde del jueves. Domingo y Cristina Verino, con su hijo de 11 años, se alojaron en Jacobacci al 900, en un monoambiente por el que pagaban 80 pesos por día. Anteayer a las 18 se cortó el agua y ante la consulta de los inquilinos, la propietaria del departamento les pidió diez minutos de paciencia. Pero a las dos horas, el agua no volvía, por lo que Verino fue nuevamente a consultar. La mujer, de muy mala manera le dijo, según denunció el turista cordobés, que "ella no era adivina para saber cuándo iba a venir el agua. Además intentó culpar a mi hijo de haber cerrado la llave de paso y dijo que si no nos gustaba, que pagáramos y nos fuéramos". Los Verino, profundamente ofendidos, ya que aparte del problema del agua, dijeron no haber contado en el departamento con ropa blanca, elementos de higiene, luz en la cocina, ni otros servicios básicos en un sitio turístico, prepararon sus cosas y se aprestaron a irse. Pero exigieron que en lugar de cobrárseles 240 pesos por los tres días, se les rebajara a la mitad el último, ya que a esa altura de la noche, debían irse a buscar otro alojamiento por motivos ajenos a su voluntad. El constructor cordobés fue con cien pesos a entregarle a la propietaria del lugar –otros cien habían sido dados como seña al momento de alquilar– pero la mujer no se los quiso recibir. Después apareció el marido, quien además de insultar al turista, le propinó dos certeras trompadas. "Me subí al auto y le dije a mi mujer que me había pegado, pero ella no me creía. Entonces apareció la mano por la ventanilla y ligué otra trompada en el ojo", afirmó el hombre. Rápidamente hicieron la denuncia policial. "En la comisaría nos sugirieron que no iba a pasar nada, pero yo soy médica, así que exigí la presencia del forense, quien certificó las lesiones de mi marido en la cara" expresó la mujer. Luego el matrimonio notificó a los inspectores de Turismo de la comuna, a los de Comercio de la provincia y a los representantes de la Cámara de Comercio local. |
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