Viernes 21 de febrero de 2003
 

La cooperativa deslindó toda responsabilidad

 
  NEUQUEN (AN).- Los directivos de CALF no anduvieron con vueltas para explicar el origen del apagón registrado el martes pasado: "la responsabilidad es del Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN) por no realizar el mantenimiento de sus equipos".
El gerente general de la cooperativa, Juan Carlos Neville, fue comisionado por la conducción de la entidad, para intentar explicar a los usuarios por qué estuvieron más de diez horas sin luz desde la noche del martes hasta pasado el mediodía del miércoles. Para calmar los ánimos, aseguró que, en un principio, la cooperativa "se hará cargo como prestador primario del servicio" de todos los daños que haya ocasionado el corte de energía a los usuarios de la ciudad. Pero luego le pasará la factura al EPEN para que le reintegre el dinero desembolsado por este concepto.
En una conferencia de prensa brindada ayer en la sede social, Neville -que en ningún momento explicó si la cooperativa tiene un plan de contingencias- indicó que el apagón que afectó a más de 170 mil usuarios de Neuquén y Cipolletti se originó por la falta de mantenimiento en las celdas que tiene el EPEN en la Central Alto Valle. Pero hasta ayer por la tarde todavía no estaba redactado el informe técnico final de la usina térmica sobre las causas y los efectos del siniestro del martes.
Desde las celdas se abastece a la capital neuquina, y los equipos que transportan la energía "tendrían que haber sido reemplazados en el año 2000 por obsoletos", indicó Neville.
"Así estaba previsto desde el año 1999 cuando se realizaron las audiencias públicas sobre tarifas", recordó. También precisó que el EPEN debería haber desembolsado "poco más de 550 mil pesos para reemplazar estos equipos".

En la oscuridad, dañaron cinco micros

NEUQUEN (AN).- Cinco colectivos de la empresa Indalo fueron dañados durante el apagón del martes pasado, sufriendo la rotura de vidrios y abolladuras en la carrocería.
Pasada las 22 cuatro de los ómnibus fueron atacados al final de la calle Pérez Novella, en el oeste de la capital neuquina. A pesar de los daños no se registraron lesionados. Según informó la policía, el ataque se produjo por personas que no fueron identificadas y "que aprovecharon la oscuridad en el lugar, debido al apagón, para atacar los colectivos".
Otro micro fue atacado en Gregorio Alvarez, cuando circulaba por la avenida principal del barrio. Tampoco se registraron lesionados en este ataque y las personas que lo cometieron actuaron en la mismas circunstancias que en los hechos anteriores.
Como consecuencia de los ataques, las comisarías 18 y 21 de la ciudad iniciaron la investigación correspondiente de forma conjunta con la fiscalía General.
Los ataques a los colectivos de Indalo fueron una constante en los últimos meses. Semanas atrás, durante una protesta que realizaron vecinos del oeste de la ciudad, varios micros fueron secuestrados mientras cubrían el recorrido por esta zona.

   
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