Jueves 13 de febrero de 2003

 

 

Calamitoso estado de la ruta al Llao Llao

 

La señalización en el trayecto brilla por su ausencia, está ondulada y nadie se hace cargo de su reparación

  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- La avenida Exequiel Bustillo, que comunica el centro de esta ciudad con el barrio Llao Llao, presenta un estado deplorable, pero todo indica que seguirá así por mucho tiempo. Repararla demandaría una inversión millonaria y ningún organismo público está dispuesto a afrontarla.
Los automovilistas deben transitar atentos no sólo a su sinuosa traza sino a los bordes carcomidos de la carpeta asfáltica, que además está ondulada en muchos sectores y en otros se resquebraja día a día por el uso intenso. La señalización horizontal desapareció hace años y la vertical deja mucho que desear.
La llamada "ruta a Llao Llao" tiene 25 kilómetros y numerosas curvas que acompañan la costa del Nahuel Huapi. Es vía de comunicación obligada para todos los barrios del Oeste y también constituye un circuito turístico de singular belleza.
Pero insólitamente ni Viarse ni Vialidad Nacional se responsabilizan de encarar una reparación a fondo de la calzada. El organismo provincial admite que tiene a su cargo la "conservación" de la ruta desde que en enero de 1986 le fue transferida desde Nación, pero sólo le hace "bacheos" y no cuenta con presupuesto para ninguna obra de envergadura.
En Vialidad Nacional explicaron que la jurisdicción ya no les pertenece y que la provincia tiene "jurisdicción y competencia" plena sobre la arteria. A todo esto el municipio, "la ve pasar" y no plantea reclamos concretos para lograr la recuperación del pavimento, que se deteriora a paso acelerado.
Hace pocos días un lector de este diario con domicilio en capital federal, Sergio Grosny, protestó por la falta de líneas demarcatorias en todo la ruta. "No se concibe que una máquina de fabricar divisas tanto para la provincia como para el país, como lo es este camino, esté en estas condiciones. Es peligrosísimo", aseveró.
Consultado por "Río Negro", el delegado local de Viarse, Nelson Sheffield, dijo que el organismo provincial "no tiene ningún tipo de presupuesto" para destinar a un mejoramiento integral de la Bustillo. "Somos conscientes de que se hace muy poco: apenas el bacheo, el mantenimiento de carteles y el despeje de nieve en invierno -agregó-. Pero no podemos planificar otro tipo de trabajos porque la propiedad de la ruta sigue siendo de Vialidad Nacional".
Desde la regional Viedma de este último organismo aseguraron que la cuestión de la propiedad es "una entelequia". El funcionario consultado explicó que el tramo Bariloche-Llao Llao de la ruta 237 "dejó de ser parte de la red nacional de caminos" luego del acuerdo firmado hace 17 años con Río Negro, y que "no puede haber ninguna excusa" para que la provincia se desentienda del estado de la calzada.
"Podrá haber algún acto administrativo que perfeccionar, pero es un hecho que la ruta es de ellos, como ocurre con otros tramos transferidos a los que VN no atiende más desde hace años", agregó la fuente.
La última repavimentación parcial que recibió la Bustillo data de 1995, cuando la ciudad recibió una lavada de cara en vísperas de la V Cumbre Iberoamericana de Presidentes. Desde entonces el mantenimiento fue prácticamente nulo y el desgaste resultó inevitable.
Sheffield indicó que la Bustillo tiene una enorme carga de tránsito, que ronda los 17.000 vehículos diarios en promedio, con picos de 24.000 durante las temporadas turísticas. Dijo que existe un estudio terminado para efectuar una recuperación total.
   
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