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Jueves 20 de febrero de 2003 | |
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Nadie puede esquivar el internismo |
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Hasta el ARI, un partido que a lo largo de meses se preparó para evitar internas y alejar así el desgaste que éstas suelen implicar, está cayendo enredado en ese proceso. Una expresión de esto es lo sucedido en Viedma en torno del tema. En Bariloche, en tanto, el PJ marcha derecho a una dura colisión para diputados. |
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| Se extienden las internas. Ningún partido se salva de la maraña de fricciones y colisiones que implican. Ni chicos ni grandes. Y lo más grave es que el grueso de ellas no se sustenta en diferencias de ideas y propuestas a bajar a la comunidad. Muy por el contrario: expresan meras apetencias personales. A medida que las posibilidades de ascenso son más gratificantes en las remuneraciones, las internas adquieren mayor intensidad porque los postulantes son mucho más numerosos. No importa la capacitación y trayectoria que respalde la aspiración. Sólo llegar, aunque sea con discursos y a los codazos. El pedido de la gente de "caras nuevas" es hasta adoptado como un reclamo propio por algunos, pero cuando llega el momento de definir la ocupación de cargos, parece que es lo menos que importa. En Río Negro de las internas no se salva ni el ARI, el partido liderado a nivel nacional por Lilita Carrió, uno de los más jóvenes del país. Con el inicio del período legislativo de este año los legisladores Eduardo Chironi -quien llegó a la banca por el Frente Grande- y Guillermo Wood -por la Alianza-, que hoy conforman un mismo bloque, intentarán obtener la denominación del ARI. Hoy es sólo un cartel que identifica al bloque pero no está reconocido como tal en la Legislatura. Para ello es necesaria además la aprobación del partido Alternativa de una República de Iguales y parece ser que están tensas las opiniones. Días atrás, en una reunión realizada en Roca, fue elegido el ex diputado nacional Hugo Piucill como presidente del partido en Río Negro y como vicepresidenta, la actual secretaria del bloque legislativo de esa agrupación, Magdalena Odarda. Para este último cargo se postuló también el viedmense Ulises Basualdo, que se desempeña en el bloque. Odarda se impuso ampliamente (10 a 2) con el apoyo de todas las localidades, a excepción de Viedma y Río Colorado. Y no es poco significativo que la dirigencia de Viedma no la haya apoyado, máxime si se computa que como secretaria del bloque legislativo del ARI, se desempeña en esta ciudad. Y en algunos medios vinculados con ARI se sostiene que también hay otra tormenta en ciernes dentro del frente interno partidario. Pero se advierte que sólo se descargará si se confirma que el candidato a gobernador Guillermo Wood también aspira a postularse como diputado por la lista sábana. Mientras esto sucede en el ARI de la capital rionegrina, la interna en el PJ de Bariloche está a punto de ebullición. Pero el candidato a gobernador Carlos Soria sigue esperanzado en que esa disputa por los cargos no genere costos para el partido. Frustrada la utópica pretensión de lograr una lista de unidad en toda provincia, ya son al menos cuatro los candidatos lanzados para llegar a la Legislatura desde la boleta del Circuito Andino. Y puede haber más. A cuatro días de la presentación de listas, el sector que lidera el candidato a gobernador Carlos Soria no tiene todavía un candidato propio a legislador circuital, pero no sería de extrañar que terminen impulsando al actual concejal "delbellista" Ricardo Ledo. Los otros anotados hasta ahora son Daniel Barrio, Antonio Jalil y Wálter Cortés, que aspira a renovar su banca en la Legislatura provincial. Falta también que se defina Ovidio Zúñiga, que quiere una banca como sea, por la sábana o compitiendo en el circuito. Salvo el último, los demás apoyan la lista sábana del oficialismo y contarán con la ecuménica bendición de Soria. "En la interna está todo bárbaro -dijo ayer el candidato a gobernador-. El viernes a más tardar quedará claro quiénes se postulan. Todos los compañeros candidatos circuitales que jueguen con franja son oficialistas. No hay ninguna preferencia de mi parte. Yo vendré a levantar la mano del que gane, como hice en El Bolsón". Más allá de que los seguidores barilochenses de Soria lleven su propia boleta, el sindicalista Wálter Cortés se siente fuerte para ganar el 30 de marzo y no pierde oportunidad de recordar que -si bien en su momento apoyó a Carlos Larreguy- ahora trabaja junto a Soria. Aprovechó también para distanciarse de Zúñiga y disentir en su actitud de "bajar" de una banca de diputado nacional a pelear a como dé lugar por un lugar en la Legislatura de la provincia. "En política hay que tener dignidad", observó. Soria reconoció que la elección presidencial, con tres candidatos peronistas, "tendrá su influencia" en Río Negro, pero no cree que perjudique sus posibilidades de llegar a la gobernación. (AV/AB) |
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