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Martes 4 de febrero de 2003 | ||
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Venezuela va retornando a la normalidad |
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Tras el levantamiento del paro opositor, los comercios y bancos volvieron a abrir sus puertas, aunque el sector petrolero sigue funcionando a media máquina, ya que en éste se mantienen algunas medidas de fuerza. El gobierno aplicará controles de cambios para evitar la fuga de capitales. Piden negociación política. |
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La oposición venezolana comenzó el a desmontar un ya agonizante "paro cívico" de dos meses , mientras afinaba una nueva estrategia electoral para sacar al presidente del poder. La huelga no logró su objetivo de que Chávez acepte un adelanto de elecciones, pero permitió a la oposición impulsar una serie de instrumentos legales que abran el camino a unas votaciones para mediados de este año. Los opositores celebraron también como un éxito la recolección de firmas el domingo para apoyar una serie de iniciativas, incluyendo un referendo revocatorio del mandato de Chávez. El regreso a la normalidad después de dos meses de huelga será lento, ya que el conflicto en la industria petrolera continuará hasta que haya una solución para unos 8.000 técnicos y gerentes despedidos de la empresa estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA). También los venezolanos deberán enfrentar las consecuencias económicas de los dos meses paralización, una de las cuales será el control de cambio que comenzará a aplicarse esta semana. La alianza opositora Coordinadora Democrática oficializó el domingo la suspensión del paro cívico, pero llamó a los sectores económicos a mantener horarios de "protesta" para sostener la presión dentro de las negociaciones para encontrar una salida a la crisis. La coalición opositora Coordinadora Democrática (CD) afirmó que para la enmienda constitucional se recogieron 5,48 millones de firmas, "lo que representa más del 60% de los electores inscritos". Pero para cualquiera de estas salidas, aunque pueden ser pedidas por los electores, se requiere la intervención del Consejo Nacional Electoral (CNE), cuya directiva está a punto de ser cambiada por el parlamento, que domina el oficialismo. En la mañana, la mayor parte de comercios y tiendas comenzaron a abrir y los centros comerciales informaron que durante la semana abrirán sus puertas a los clientes. También más escuelas primarias y secundarias reanudaron sus actividades. Los bancos privados retornaron a su horario normal, después de trabajar sólo tres horas diarias, y las televisoras anunciaban una vuelta a su programación normal esta semana. Sin embargo, los gerentes petroleros rebeldes advirtieron que hasta que no se logre un acuerdo en PDVSA, no será posible la normalización del país. El dirigente del sindicato Unapetrol, Horacio Medina, advirtió que la industria petrolera tendrá que esperar al menos cuatro meses para recuperar su ritmo de producción. Explicó que en el país sólo se están produciendo unos 60.000 barriles diarios de gasolina en una refinería del oriente venezolano, la cual debe ser sometida pronto a una operación de mantenimiento. El resto de la gasolina que se consume es producto de las importaciones masivas que está haciendo el gobierno. "Nosotros contamos con el apoyo del pueblo para demostrar que no cometimos sabotaje a las instalaciones, como dice el gobierno", dijo a la cadena Unión Radio. A la vez, el dirigente Timoteo Zambrano, uno de los negociadores de la oposición, recalcó que sin un acuerdo de gobernabilidad el gobierno no obtendrá "recursos del exterior" para recuperar al país. |
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