Martes 25 de febrero de 2003

 

Proyectan un complejo termal en Bariloche
 

El lugar elegido es el cerro San Martín, donde se detectaron aguas termales a 32 grados. Invertirán 35 millones de dólares y aseguran que será uno de los mejores complejos del mundo.

  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- En un futuro próximo esta ciudad podrá incorporar a su oferta turística los baños termales, un servicio que permitiría generar un importante valor agregado a la actividad. Los estudios geológicos y geotérmicos realizados a 12 kilómetros del Centro Cívico fueron positivos y determinaron la existencia de aguas termales de 32 grados.
El emprendimiento es impulsado por el empresario Jorge Caputo y abarcará el cerro San Martín (llamado también cerro La Vieja) ubicado frente al centro invernal cerro Catedral. Son más de 400 hectáreas privadas y en ellas se emplazarán tres barrios cerrados, un gran resort que incluirá el "Spa de las Nubes", un centro de rehabilitación médica, una aldea de chacras, zona deportiva y un parque temático. En total se prevé invertir 35 millones de dólares.
El proyecto es uno de los más grandes de la región y sólo podría ser comparable con el Country Club Arrelauquen, ubicado al sur oeste del cerro Otto, el cual ofrece entre sus atractivos una moderna cancha de golf de 18 hoyos.
El proyecto "Villa Cerro San Martín", propiedad de Caputo, prevé construir sobre la ladera oeste del complejo, donde se ubica el portal de ingreso, en inmediaciones del actual camino de acceso, tres "aldeas de montaña", cada una con alrededor de 30 viviendas residenciales.
Estas funcionarían como barrios cerrados y las residencias, serán privadas y también operarán como tiempos compartidos, a semejanza de lo que sucede en los principales centros turísticos del mundo. Para esto se destinarían alrededor de 80 hectáreas.
En la parte alta del cerro, sobre un área de 60 hectáreas, se construirá un resort que incluirá el "Spa de las Nubes", el cual ofrecerá una panorámica vista de 270 grados. Caputo asegura conocer "prácticamente todos los complejos termales del mundo" y afirma que en la mayoría los baños tienen lugar en sitios cerrados. "Este va a ser diferente, va a complementar el agua termal con el maravilloso paisaje local. Estoy convencido que será el mejor del mundo", afirmó.
El resort no incluirá un gran hotel sino módulos de 15 o 20 habitaciones, unidas por galerías vidriadas, de manera tal que los huéspedes puedan ver el paisaje mientras transitan desde las habitaciones a las piletas.
Sobre la ladera este del cerro proyecta emplazar un parque temático. "El cuidado del medio ambiente será siempre uno de los principales objetivos, ya que la naturaleza es el principal valor agregado de esta región y por lo cual vienen los turistas", afirmó Caputo.
También se construirá un centro de salud y belleza, que incluirá pequeñas cabañas, para que los clientes puedan pasar el día y ser atendidos por los profesionales. En sus inmediaciones se emplazará un centro deportivo y también varios quinchos.
El spa, el resort, el centro de salud y otros servicios serían concesionados y operados por empresas del rubro. El agua termal será elevada desde el pozo, ubicado en la parte baja del predio, con bombas hasta el complejo termal.
En el extremo norte del predio, en 150 hectáreas, planifican construir chacras de unos 5.000 metros cuadrados cada una. Estas serían provistas de agua termal y mineral por red. El empresario indicó que el predio contará con los servicios básicos y ruta de acceso pavimentada.
Caputo estimó que el emprendimiento generará numerosos puestos de trabajo, y que entre otros servicios complementarios incluirá un pequeño centro comercial, lavaderos, guardería infantil, sala de juegos para niños y otros entretenimientos. El emprendimiento ya fue declarado de interés turístico provincial.

"Una bisagra para la economía de la ciudad"

El arquitecto Jorge Caputo (primo de Dante, quien fuera canciller argentino) aseguró que "el proyecto será una bisagra para el turismo barilochense", y aseguró que las aguas termales son uno de los negocios más seguros y exitosos en el turismo del mundo.
"Este es un proyecto para desarrollar ahora. Es un emprendimiento turístico (una de las actividades económicas más sólidas), está emplazado en Bariloche (destino turístico con renombre internacional) y tiene aguas termales: son tres puntos de apoyo con los cuales no puede fracasar", sostuvo Caputo en diálogo con "Río Negro".
Agregó que el turismo termal funciona durante todo el año y estimó que "otra de las ventajas" del emprendimiento es que no compite con ningún otro establecimiento o servicio local. "Es algo nuevo que beneficiará a todos", afirmó.
Caputo es arquitecto, se radicó en Bariloche hace tres años y es propietario de la Aldea del Este, un loteo inmobiliario al este de la ciudad. Hijo de inmigrantes italianos, nació en Bariloche en 1922. Asegura haber trabajado durante 60 años en la construcción. Actualmente las empresas familiares son dirigidas por sus cuatro hijos.
El empresario se entusiasmó con el turismo durante sus 10 años de residencia en España, donde construyó varias obras.
"Conozco España desde 1949 y admiro el vertiginoso crecimiento que tuvo y el enorme potencial turístico que desarrolló".
Entiende que el potencial turístico de la Argentina es aun más importante, sólo que hace falta desarrollarlo.

Virtudes y beneficios

Desde 1989 la Organización Mundial de la Salud considera que las aguas termales son un buen recurso para el tratamiento de diversas afecciones y contribuyen a mejorar la calidad de vida.
La utilización de las aguas y fangos debe realizarse por indicación médica que debe especificar el tipo de agua y el tiempo de exposición.
Ente los principales efectos se destacan los químicos, que se manifiestan cuando las sustancias que tiene el agua pasan por ósmosis al torrente sanguíneo; los físicos, se deben a la temperatura del agua, ya que éstas producen dilatación periférica, con lo cual se mejora la oxigenación de los tejido de las zona expuestas.
Por último, los biológicos, se producen por la acción de la flora y fauna hidrotermal, integrada por microorganismos en compleja unión.
Para que los fangos, y sobre todo las aguas surtan el efecto necesario, los médicos especialistas recomiendan, con la dosificación estipulada, realizar programas de siete días corridos como mínimo.
Las aguas termales pueden ser salinas, carbonatadas y gaseosas. Por su temperatura de clasifican en frías (menos de 20 grados), hipotermales (21 a 35), mesotermales (36 a 45) y hipertermales (más de 46).
En Bariloche los estudios determinaron que el agua encontrada es de característica carbonada, a 32 grados.
   
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