Sábado 15 de febrero de 2003
 

Los Calzones recordaron los "80

 

Convocaron a más de dos mil personas en la costanera de Viedma.

 
"Los Calzones" mostraron un sonido muy ajustado en un recital multitudinario.
La visita de Los Calzones a Viedma en el marco de la gira Guillatún Solidario convocó a una multitud de más de dos mil personas que acompañaron con fervor el espectáculo de presentación de "Plástico", el peculiar trabajo sobre temas de rock nacional de la década de los 80. La buena afluencia de público en la costanera ya se anunciaba anticipadamente por la cantidad de jóvenes que se apostaron en la zona durante el armado del escenario.
Con los primeros acordes del tema "Kanishka" quedó en evidencia que el público estaba con Los Calzones y que se habían acercado con muchas ganas de saltar y bailar al ritmo del ska. Y eso fue lo que sucedió hasta una hora y media después con el cierre del clásico punk de Los Violadores "Uno, dos, ultraviolento".
La banda sonó tan ajustada que da envidia y se nota el entrenamiento de las extensas giras y las temporadas estudiantiles en Bariloche; y ese ritmo de trabajo se refleja también en lo compacto del recital, aún cuando hubo picos de festejo en los temas "Ji, ji, ji" -buena versión para un tema difícil de reinterpretar- y el maradoniano "Te sigo". Al ritmo de los saltitos y los bailes divertidos se le hizo un espacio para las más melódicas "Rezo por vos" (García-Spinetta) y "Ella vendrá" de los extintos Don Cornelio.
Toda la puesta en escena fue excelente; y en lo técnico sobresalió el sonido, no sólo por el caudal, sino por la calidad, que permitió discernir cada modulación del Pingüino, quien además de cantar dedicó varias parrafadas a denostar a los políticos y la dictadura militar, además de recordar la guerra de Malvinas -con canción, bandera y discurso-. Quizá estas referencias hacia el público terminaron siendo excesivas -junto a Maradona y una exagerada alabanza al público local-, y bordearon en forma innecesaria la demagogia.
Además del cantante Pingüino (quien lleva adelante el show) se destacaron el guitarrista Pitulo, el buen acompañamiento de la base con el bajista Pájaro y "Banana" en batería, y los imprescindibles vientos de Gargamel en trombón y Azrael en trompeta.
En definitiva, Los Calzones dejaron en claro que son una banda especial para el vivo, donde explota su mejor perfil y cuando sus composiciones más lucen. Ojalá cumplan la promesa de volver el año que viene con la gira de presentación del próximo disco. Varios quedaron con ganas de seguir saltando otro buen rato.

Ignacio Artola

   
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