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Domingo 26 de enero de 2003 | |
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Los rigurosos operativos cambiaron la noche en el Río Grande |
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Detectaron menos clientela y lo atribuyen al intenso control del municipio y la policía; también hay menos desmanes |
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| NEUQUEN (AN).- Los operativos intensos que dominan el escenario de los boliches de la noche neuquina tienen efecto disuasivo sobre los clientes: concurren menos, los que van no protagonizan revueltas, y hay menos droga. El operativo del viernes comenzó a las 22 y continuó hasta la madrugada con inspectores municipales de comercio, bromatología, calidad ambiental y de tránsito. La policía de la provincia y de la federal se apostaron en cada cuadra de Olascoaga, el boulevar de los boliches que remata en el balneario de la música. Dos boliches fueron sorprendidos vendiendo bebidas en botella, una modalidad que prohíbe expresamente una ordenanza para evitar que sean usadas como armas en eventuales riñas callejeras entre grupos de jóvenes. Además de la avenida Olascoaga y el Río Grande, los controles automovilísticos se multiplicaron en otros sectores de la ciudad, sobre todo en los ingresos y en las salidas de la capital. Los sabuesos exigen la documentación completa del auto, incluso la última patente paga y el seguro automotor. A los menores al volante les retuvo el vehículo hasta la llegada de los progenitores. Este tipo de operativos se extenderá durante todo el verano en virtud de los "excelentes resultados" que tuvieron los anteriores. La continuidad fue sellada el viernes entre el subsecretario de Desarrollo Local, Alejandro Vidal, el juez federal Guillermo Labate, y representantes de la policía provincial y de la delegación local de la federal. El municipio puso a disposición el número telefónico 103, de la guardia Defensa Civil, para recibir denuncias o llamados de emergencias durante las 24 horas. El operativo del viernes fue intenso pero menos movido que el anterior, día que el municipio clausuró dos boliches de onda y labró un centenar de actas de tránsito. La federal pudo, por otra parte, tender las redes a una organización y realizar días más tarde detenciones por la comercialización ilegal de estupefacientes. La policía de la provincia, en tanto, vigila que no se produzcan desmanes ni desorden en la vía pública que puedan poner en peligro la vida de personas. Las caras visibles del municipio y de las organizaciones comprometidas en estos operativos pactaron la realización de reuniones evaluativas periódicas a fin de corregir el rumbo y obtener resultados positivos. |
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