Viernes 17 de enero de 2003

 

Tras el acuerdo, más familias fueron al terreno usurpado en Cipolletti

 
  CIPOLLETTI (AC).- El principio de acuerdo en el conflicto de la toma cipoleña tentó a más familias. El miércoles por la noche, evadiendo el control policial, cinco grupos más fueron a instalarse en la chacra usurpada. Pero esta vez, los mismos ocupantes fueron los que pusieron el freno. “No queremos vivos”, dijeron los usurpadores ayer, mientras tomaban nota casilla por casilla de cada uno de los grupos familiares que se encuentran en el predio desde hace casi dos semanas.
Durante la jornada, referentes de Acción Social del municipio fueron a la chacra usurpada y anunciaron que a partir del martes empezarán el relevamiento acordado en la audiencia judicial. El propósito de esta medida es saber fehacientemente cuántas son las familias asentadas en el predio y cuáles son sus necesidades para evaluar luego quienes podrán ser beneficiadas inicialmente con los loteos sociales que prevé implementar el municipio. Hoy el gobierno municipal dará detalles de este sistema en una conferencia de prensa.
Los ocupantes estimaron ayer que “unas 450 familias” se encuentran viviendo en la propiedad de 10 hectáreas. Hasta ahora se hablaba de 400 grupos familiares.
La cifra exacta todavía se desconoce porque cuando la Justicia intentó obtener los datos a principios de esta semana, la gente no lo permitió. Ahora, será la secretaría de Acción Social la encargada de recorrer las distintas casillas.
Los ocupantes dijeron ayer que decidieron preparar un listado “propio” de la gente que se encuentra en la toma para “evitar avivadas”.
Comentaron que el miércoles por la noche cinco nuevas familias fueron a la chacra a ocupar un espacio. Si bien les permitieron el ingreso, los ocupantes aseguraron que sus nombres “no figuran” en el relevamiento que realizaron ayer.
“No vamos a permitir que entre nadie más. No queremos vivos”, enfatizaron. Expresaron que no es justo que ahora, al haber logrado un principio de acuerdo, algunos quieran aprovechar la situación. “Nosotros estamos desde el primer día y vamos a defender esto”, remarcaron.
El miércoles, en una audiencia entre las partes en el Juzgado Civil, el municipio se comprometió a comprar tierras y realizar un loteo accesible para trasladar a las familias. Se pautó un plazo de 60 días, en el que se congelarán las medidas judiciales.
Aunque el abogado que representa a los ocupantes dijo después del encuentro que algunas familias iban a retirarse de la chacra “de a poco” luego de que se tomara nota de cada grupo familiar, la mayoría de las personas consultadas ayer aseguraron que la “idea es seguir en el terreno hasta tener realmente una respuesta”.
“Nadie se anima a irse antes de tiempo”, reconoció uno de los ocupantes.
Por otra parte, Salud Pública realizó el miércoles el primer contacto con la gente de la toma. “Pidieron una lista de los chicos para hacer una revisación médica a cada uno”, informó la gente.
   
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