Brollo se impuso en la interna y ahora el MPN va por "Pechi" Quiroga

El oficialismo ganó con el 56% de los sufragios.Balda quedó en segundo lugar y Jalil, tercero.

NEUQUEN (AN).- En medio de la hoguera política que rodea al o

Jorge Sobisch reunió a los cuatro competidores de la interna y habló en un acto ante mil afiliados al partido provincial.

ficialismo por la denuncia de intento de soborno para controlar el Tribunal Superior de Justicia, el gobernador Jorge Sobisch recibió ayer una refrescante lluvia de enero: Federico Brollo, el hombre que apoyó en la interna del Movimiento Popular Neuquino (MPN) se quedó con un indiscutido triunfo y ahora va a pelearle la intendencia a Horacio Quiroga el próximo 2 de marzo.
Al cierre de esta edición, la lista Blanca de Brollo obtenía 9.035 votos (el 56,02%), Herminio Balda 3.378 (20,94%), Luis Jalil 2.917 (18.09%) y Raúl Rizzo 400 (2,48%). Los datos corresponden al escrutinio provisorio de 170 mesas sobre un total de 172, por lo que nada hará cambiar estos guarismos.
El triunfo de Brollo (lista Blanca) fue tan amplio que se quedó con todo, incluidos los 9 candidatos a concejales. Esto es así porque ninguno de sus oponentes logró superar el piso del 25% de los sufragios que establece la carta orgánica partidaria para incorporar al menos 3 representantes por la minoría.
Para el gobernador, la de ayer fue una prueba difícil. Necesitaba que su hombre se impusiera en las urnas, en lo posible por una diferencia que no diera lugar a discusiones. El objetivo fue logrado.
También quedaron atrás las dudas que existían sobre el nivel de participación de los afiliados. Los más optimistas hablaban de un índice de asistencia del 30%, pero en la interna de ayer se superó ese porcentaje. De un padrón de 43.293 afiliados, 16.128 fueron a votar (el 37,25%), según datos oficiales de la junta electoral del MPN que a las 21 ya tenía prácticamente toda la información sobre estos comicios.
"Voy a poner corazón y militancia porque en estos cuatro años sólo se puso cemento", dijo Brollo al visitar su local de campaña, cuando los datos de la elección ya lo daban ganador. También comenzó aguijonear al actual jefe comunal, el radical Quiroga, al que le advirtió que perderá la elección en marzo porque el MPN "va a recuperar la ciudad".
El oficialismo celebró el triunfo con un acto frente a la municipalidad de Neuquén. Pasadas las 20, grupos de afiliados que apoyaron a Brollo comenzaron a concentrase al pie del monumento al general San Martín. "Olé, olé, es para el "Pechi" que lo mira por TV", cantaban frente a la municipalidad.

El 2007 sigue en pie

Entre las pancartas sobresalía una por su tamaño y también por el mensaje que contenía: Era una bandera con una inscripción que aludía a las intenciones que tiene Sobisch de proyectarse a nivel nacional en 2007.
Sobre el palco montado en avenida Argentina, Sobisch reunió a los cuatro precandidatos, tal como se habían comprometido el viernes último en una reunión que se realizó en la junta de gobierno. Fue una señal de unidad enviada por el MPN de cara a las elecciones municipales de marzo.
El gobernador y presidente del partido, rodeado por Brollo, Balda, Jalil y Rizzo habló precisamente de la unidad partidaria. También dejó planteado que no sólo irá por la reelección, sino también que su intención de proyectarse a nivel nacional en 2007 sigue intacta.
Desde la tribuna y ante más de mil personas que fueron a celebrar el triunfo del oficialismo, Sobisch habló de los escándalos que envuelven al gobierno. Fueron sus cinco minutos de gloria: "No tengo bronca, tengo las manos abiertas", dijo intentando destrabar el nudo que se le había formado en la garganta.
El primero en reconocer la derrota fue "Chito" Jalil. A las 19.50 salió por radio a felicitar a Brollo, que también estaba saliendo al aire en ese momento, pero no lo dejaba hablar.
Mientras Jalil quería meter un bocado, el ahora candidato a intendente del MPN lo convocaba a sumarse a la campaña y ensayaba ideas sobre su proyecto a futuro. Jalil se molestó y le pidió que no lo interrumpa. Fue cuando dijo que es la hora de "las penas de unos y las alegrías de otros".
Para el triunfo de Brollo, el gobierno puso todo lo que tenía a su alcance. El hombre de la lista Blanca dispuso de un interesante parque automotor para trasladar afiliados y de un refuerzo de asistencialismo en sectores carenciados de la sociedad, de la mano de la subsecretaría de Acción Social, donde trabaja la ahora candidata a concejal en primer lugar Gloria Sifuentes.
Balda resumió este operativo de la lista Blanca en una sola frase: "No se puede luchar contra el aparato". El ex precandidato por la lista Verde habló desde su local partidario cuando el resultado ya era irreversible.

La sorpresa

La sorpresa que escondían las urnas se la llevó "Chito" Jalil que se tenía fe para el primer lugar y terminó tercero, luego de Balda. Esa ubicación no la esperaba al menos el ex intendente y actual diputado nacional.
Los comicios no tuvieron sobresaltos, aunque a la mañana, Rizzo denunció que en las mesas faltaban boletas de su lista y dijo que iría a la Justicia para anular la elección, una amenaza que anoche quedó en la nada, según dijeron sus colaboradores.

Oxígeno para el oficialismo

Con el auxilio de todo el aparato partidario y del Estado, Jorge Sobisch pasó ayer con éxito el primer test electoral de un año que acumulará elecciones.
El triunfo de Federico Brollo en la interna del MPN oxigena una gestión que enfrenta denuncias de corrupción. Si el resultado de ayer hubiera sido otro, el gobierno agregaba otro motivo de preocupación a los ya conocidos, como la investigación judicial por el escándalo de las ternas en el Tribunal Superior de Justicia y el manejo discrecional de la política de asistencia social en Centenario.
De aquí en adelante, el líder del partido provincial intentará recuperar el control político de la ciudad capital. Pero ese será otro examen, convocado para el 2 de marzo, donde habrá otros protagonistas que también tienen aparato, aunque más discreto de lo que maneja el gobierno neuquino. En fecha aún incierta el oficialismo deberá luego presentarse en la gran batalla, la pelea por la gobernación y el resto de los cargos provinciales. En esa pulseada ahora se tienen mucha fe. (AN)