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Viernes 3 de enero de 2003 | |
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"Queda poco margen" ante los aumentos |
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Alfonso Carro indicó que la cooperativa necesita eliminar gastos, como el derecho de introducción a nichos. |
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| NEUQUEN (AN).- "Por ahora podemos sostener la tarifa pero veremos hasta cuándo, si continúan los aumentos dispuestos por el gobierno nacional", advirtió Alfonso Carro, presidente de CALF, frente a la corrida sucesivas de subas. Carro remarcó que con la absorción de los aumentos la entidad se ubicó en un plano más competitivo frente a empresas privadas en la región. En el último año y medio, CALF redujo en un 30% promedio el precio de la tarifa absorbiendo 12 milésimas el kilovatio-hora de la diferencia inicial de 27 milésimas, recordó. Pero "queda poco margen" de aguante, advirtió, a menos que consiga eliminar otros gastos, por caso el originado en el derecho de introducción a nichos por el que la cooperativa paga al municipio medio millón de pesos al año. Por cada féretro que va a nicho CALF abona 550 pesos, la tasa más cara del país. La desproporción es tan grande que si la comuna no aplica un precio "razonable" CALF tiene previsto construir una necrópolis propia. El intendente Horacio Quiroga y su jefe de gabinete, Fernando Gallo, son proclives a un acuerdo, lo mismo que el Concejo Deliberante pero como "la aprobación del presupuesto 2003 pasó para marzo, esta situación se mantiene invariable con pérdida para nuestros asociados", indicó Carro. El presidente de la cooperativa cree firmemente que la diferencia de 500.000 pesos bien podría funcionar como colchón de futuros aumentos. Carro habló con la prensa luego de recibir al diputado nacional Luis "Chito" Jalil, precandidato a intendente por el Movimiento Popular Neuquino. El dirigente emepenista acompañó la propuesta de readecuación de la tarifa del cementerio central y fue más allá en defensa de la cooperativa: frente a la futura licitación del servicio eléctrico en Neuquén capital, deslizó la posibilidad de asimilar la compulsa a la iniciativa privada, con lo que CALF obtendría una ventaja comparativa frente a sus eventuales adversarios. Carro, por su parte, advirtió que la política de no trasladar los aumentos de energía eléctrica a los usuarios será posible en tanto la economía no se dispare, los insumos no trepen por las nubes, y continúe la cooperativa transitando el camino de la eficiencia y de racionalización en los gastos. En positivo remarcó la conciliación de las cuentas con la municipalidad al 31 de octubre, y tener "al día" la facturación con la hidroeléctrica Cerros Colorados y con Duke, la empresa norteamericana heredada de la gestión de Osvaldo Bonvín. También, haber ordenado administrativamente a CALF y "sanear sus cuentas, pero hay que seguir" afinando las líneas de acción, alentó Carro. "Son años difíciles los que vienen, después de la primera barrida de pérdidas y de gastos supérfluos queda lo más difícil", prosiguió. CALF absorbió los aumentos dispuestos en diciembre por Nación, de 9% para la categoría residencial y de entre el 12 y el 15% para la industria. Pero Carro prevé que en las actuales circunstancias se vuelve difícil mantener esta conducta, no sólo para CALF sino para otras cooperativas eléctricas de la región. De la provincia mencionó las de Zapala y en Cutral Co, que ya gestionaron aumentos en los municipios respectivos. "Por ahora podemos sostener la tarifa pero si siguen los aumentos, veremos hasta cuando", reflexionó. |
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