Viernes 31 de enero de 2003
 

Lula lanzó su plan de "hambre cero" para los brasileños

 

Busca garantizar a todos las tres comidas diarias. También habrá un plan de "sed cero" para el nordeste.

 
El presidente brasileño encabezó la ceremonia que puso en funciones al nuevo comité que combatirá el hambre en el país.
BRASILIA.- Hace 50 años, cuando todavía era un niño, el actual presidente del Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, abandonó el paupérrimo pueblo de Caetés donde había nacido, y partió con su madre y sus hermanos hacia el soñado Sao Paulo, en busca de un destino mejor, en el que pudiera al menos comer todos los días.
Lula tenía entonces siete años y nunca había probado un pedazo de pan. Cuando asumió la presidencia, hace 30 días, presa de visible emoción, el hoy mandatario afirmó: "Si en los próximos cuatro años consigo que cada brasileño pueda comer tres veces por día, habré cumplido la misión de mi vida". Nadie espera que Lula, que tiene derecho a la reelección, abandone la presidencia dentro de cuatro años, pero el jefe de Estado tiene prisa por implantar su programa "Hambre Cero", "porque los que tienen hambre no pueden esperar un solo día", como suele afirmar con la autoridad de quien sabe lo que dice.
En la ceremonia en que anunció ayer el lanzamiento de su programa de combate a la pobreza extrema, el presidente brasileño recordó una frase de su coterráneo Josué de Castro, el autor de "Geopolítica del hambre": "La guerra y el hambre no obedecen a ninguna ley natural: son creaciones humanas".
El mandatario afirmó que el Brasil "necesita vencer el hambre, la miseria y la exclusión social" pero precisó: "Nuestra guerra no será para matar a nadie, sino para salvar vidas humanas".
Lula señaló que el programa, que fue lanzado en el Palacio del Planalto en presencia de ministros, legisladores y gobernadores de varios estados brasileños, así como personalidades de la sociedad civil, no tiene inspiración meramente asistencial y precisó que incluye acciones de emergencia pero estará dirigido a atacar las causas estructurales del hambre y la miseria.
El presidente se esfuerza por dejar muy en claro que alimentar a los más necesitados es apenas atender un problema de emergencia y que "la lucha contra el hambre es un paso fundamental para la superación de la miseria, de la pobreza, de la falta de oportunidades y de la desigualdad social", aseguró.
En Brasil, están por debajo de la línea de la pobreza 56 millones de personas que no logran alimentarse regularmente.
Rodeado por una platea de políticos de diversos partidos, aliados y de la oposición, el mandatario expresó que la lucha contra el hambre requiere la participación de toda la sociedad y opinó que si el problema todavía no fue resuelto, fue porque "nunca tuvo la prioridad que merece ni contó con la indispensable movilización de la sociedad".
Durante el acto, el ministro de Ciudades, Olivio Dutra, anunció que se propone integrar a la iniciativa su programa "Sed Cero" destinado a luchar contra la escasez crónica de agua que castiga a las regiones pobres del nordeste del Brasil. Allí la sequía es tan salvaje que los habitantes deben caminar leguas para acarrear el agua. En los pueblos hay bombas para extraer agua de pozos, pero falta dinero para mantenerlas. Entre otras iniciativas, el plan prevé la construcción de cisternas para captar agua de lluvia, pequeñas acequias y casetas sanitarias en varias localidades. (DPA)

Alertan del peligro de caer en el asistencialismo

El programa "Hambre Cero" que ha despertado un gran interés internacional, es también objeto de críticas.
La coordinadora de la Pastoral de la Infancia, Zilda Arns, una de las personalidades integrantes del consejo administrador del programa, de 62 miembros, criticó la idea oficial de fiscalizar el uso de los vales para la compra de alimentos mediante la presentación de recibos por parte de los beneficiarios. "Utilizar personal para examinar recibos no va a funcionar. Los recursos se gastarían mejor enseñando a las familias a plantar, elegir los alimentos, hacer una huerta", dijo Arns, en declaraciones al diario O Globo.
En tanto, la economista Sonia Rocha, de la Fundación Getulio Vargas, atacó la idea de repartir un vale para la compra de alimentos. "La mayoría de las personas que pasan hambre son niños, porque están desprotegidos en el ámbito familiar (...) el problema es la pobreza y eso requiere programas adecuados (...) de infraestructura, agua, cloacas, vivienda, educación, comida y salud, no es dar un cupón", afirmó .
Lula rebatió los cuestionamientos al asegurar que el plan Hambre Cero es "mucho más" que donación de alimentos. Explicó que sólo creando empleos, mejorando las condiciones de vida, implementando una reforma agraria y promoviendo la agricultura familiar y el cooperativismo se podrá terminar con el drama . (Reuters/DPA)

El lema: "Dar el pez y enseñar a pescar"

El "Hambre Cero" busca asegurar que los brasileños más pobres "no solo coman el pez sino que además aprendan a pescar", aseguró "Lula" parafraseando el proverbio chino.
Este ambicioso proyecto contará en este primer año con unos 1.400 millones de dólares, entre los que se cuentan los 500 millones de recursos propios del programa y, el resto, de programas de otros ministerios y de acuerdos con el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y las Naciones Unidas.
El programa consta de 60 acciones divididas en tres grupos:
• Estructurales. Son las acciones orientadas a combatir las causas más profundas del hambre y la pobreza;
• Específicas. Dirigidas a atender específicamente a las familias que no se alimentan bien
• Locales. Acciones que quedarán a cargo de los municipios y de la sociedad civil.
De este conjunto de 60 acciones, apenas diez empiezan ahora. Hasta el 31 de agosto, el gobierno concluirá los detalles del programa. En esa fecha, enviar;a al Congreso un plan plurianual para el período 2004/2008.
Las acciones piloto del programa "Hambre Cero" empezarán en dos pequeños poblados del estado nororiental de Paiuí, llamados Acauá y Guaribas, donde serán atendidas 716 familias, cada una de las cuales recibirá una tarjeta que le permitirá retirar el equivalente a 13 dólares de un banco estatal.
Cuando el programa esté en pleno funcionamiento, atenderá a mil municipios de la región semiárida del nordeste, la más pobre del Brasil, estimaron las fuentes oficiales.

   
    ® Copyright Río Negro Online - All rights reserved    
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación