La puja por la intendencia se extiende a la cultura

Mientras la municipalidad pondrá en marcha mañana el programa Neuquén Cultural, la Dirección provincial del área saldrá a responder con un ciclo de festivales callejeros.

El cine móvil es uno de los sólidos recursos que usará la provincia en la batalla cultural por la intendencia.

NEUQUEN (AN).- La pelea por los votos en la capital neuquina se desarrolla en todos los frentes. Y ahora se trasladó al ámbito de la cultura. En esa carrera alocada picaron en punta el MPN, que empuja a Federico Brollo a la intendencia, y el frente Unión por Neuquén, que alienta la reelección del radical Horacio Quiroga.
En efecto, mientras la Secretaría de Cultura y Turismo de la municipalidad pondrá en marcha mañana, por segundo año consecutivo, el programa Neuquén Cultural que recorrerá distintos puntos de la capital, la dirección Provincial de Cultura saldrá a la calle con un ciclo de festivales callejeros que lleva la impronta "Con el alma de los barrios".
Y aunque los funcionarios de cada uno de los organismos minimizaron ayer la connotación política de esa llamativa superposición y, por el contrario, optaron por tirarse flores; es probable que la cultura se transforme en la manzana de la discordia.
Por lo pronto, el secretario de Cultura de la municipalidad, Oscar Smoljan, salió a marcarle la cancha al MPN. "Si lo quiere utilizar para captar votos, está mal porque degrada la actividad cultural que tiene que servir para unir a las personas", advirtió.
Y para marcar diferencias subrayó que el programa Neuquén Cultural "es una actividad que venimos haciendo desde el año pasado". Es más, recordó que "nosotros lo habíamos anunciado desde hace mucho".
De todos modos, planteó que "todo lo que sume a la propuesta de mejorar la calidad de vida nos parece bien". "Si la provincia a partir de ahora quiere sumarse, bienvenido sea", agregó.
Desde la vereda de enfrente, la titular de la dirección provincial de Cultura, Peggy Acuña, admitió que es la primera vez que se pone en funcionamiento el programa impulsado por esa cartera, con el apoyo de la subsecretaría de Asuntos Municipales, que conduce Raúl Monti. Pero aseguró que estaba planificado desde hace tiempo y que en el interior ya se ha implementado.
Explicó que la iniciativa se originó por "una solicitud que hemos tenido de los barrios que, por el costo del transporte, no pueden acercarse hasta el centro neuquino para acceder a las oferta cultural.
Dijo que en la planificación participaron ONG´s que trabajan en los barrios y comisiones vecinales de esta ciudad. La idea, afirmó, "es reforzar su pertenencia al barrio" y anticipó que el programa se extenderá hasta los primeros días de marzo.
Descartó que la iniciativa tenga una intencionalidad política a tono con los tiempos electorales. En las elecciones del próximo 2 de marzo el MPN quiere recuperar el municipio neuquino. Pero Acuña confió que "estoy encima de todo eso". "Sé dividir la política cultural de la partidaria", consignó.
Con todo, el municipio iniciará mañana a las 20 en el playón situado frente al hospital Horacio Heller, en el oeste de la ciudad, el programa con el cual pretende llegar "al corazón de cada barrio". Al día siguiente, la provincia estrenará el suyo en el barrio Cuenca XV, ubicado también en el oeste, donde se concentra el grueso del electorado.
Las dos propuestas tiene varios aspectos en común: un escenario móvil, apuntan a la familia, son gratuitas, contemplan espectáculos musicales, títeres, payasos, y murgas. Pero los dos escenarios están separados. De un lado está el MPN y, del otro, la Unión por Neuquén.

En el plano deportivo no faltan ganas, pero es imposible competir

NEUQUEN (AN).- Entre el deporte municipal y provincial no hay una batalla, pero esto tiene una explicación: a Jorge Abayián, referente del área de Horacio Quiroga, le resulta imposible pelear con la movida que lidera Albergo Garaygorta, director de Deportes de la provincia.
Los motivos son la cuestión presupuestaria. Mientras el gobierno provincial canaliza colaboraciones por distintas vías, en el municipal se limitan a cumplir dos objetivos: ser austeros con los gastos y llevar adelante el proyecto del deporte comunitario.
Para impactar a la población y en el marco de fomentar el "deporte espectáculo" impulsado por Jorge Sobisch, los funcionarios provinciales se despachan con acontecimientos difíciles de empardar, como la llegada de equipos grandes del fútbol argentino o el Premundial de Básquet.
Otro de los puntos fuertes es el de las becas. En diciembre pasado, el gobernador se puso al día y cumplió con los pagos de las temporadas 2000 y 2001. Los beneficiados fueron deportistas de alto rendimiento con presencia en selecciones nacionales, pero apareció un nuevo grupo, el de los "referentes", cuya colaboración fue cuestionada, porque en algunos casos se trató de actividades profesionales. Discusiones al margen, contra esto tampoco se puede competir.
Pero hay más, porque en el 2002 se dio un hecho inusual. De un día para el otro apareció un nuevo equipo de fútbol, llamado Villa Iris, que desde su propio nacimiento contó con una desinteresada colaboración.
El padrino fue el fallecido ex ministro de Gobierno, Jorge Gorosito, y después tomaron la posta en la subsecretaría de Asuntos Municipales y en la flamante subsecretaría de la Juventud. Hubo un marcado apoyo y está claro que el "villero" ya se transformó en el equipo oficial.
En el ambiente municipal, mientras tanto, reina el perfil muy bajo y el "deporte espectáculo" no existe. Los cañones apuntan a la prueba de atletismo por el "Aniversario de la Ciudad", que se ganó un lugar importante en el calendario nacional; y a otras actividades con poca difusión -gimnasia artística o baelee-, pero que cuentan con el apoyo de Quiroga y compañía.
De cara a las elecciones, increíblemente se encuentra una coincidencia: tanto el actual intendente como Federico Brollo sueñan con un autódromo para la ciudad.
"Pechi" lo prometió en la campaña del "99, no cumplió, pero irá por la revancha si es que gana. El del MPN no anduvo con chiquitas y, para seguir con la movida, lo metió en un ambicioso combo junto a un estadio de fútbol para 20.000 personas.