Viernes 10 de enero de 2003 | |||
Feroz paliza a un comerciante de Cinco Saltos |
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Dos sujetos lo maniataron y le pegaron patadas en el suelo. Le exigían que entregue el dinero de la venta de un departamento. Pero el dato que tenían los ladrones era falso y no existía tal suma. |
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"Yo creo que se han equivocado de casa o tenían el dato equivocado", dijo la esposa del comerciante. Los delincuentes fueron ayer intensamente buscados por la policía, que estableció operativos en la ruta 151 porque se calcula que se movilizaban en un auto. Aunque del negocio salieron a pie, por la manera de trabajar se cree que a pocos metros del lugar los esperaba un vehículo. Víctor Hugo Maldonado, de 43 años, permaneció ayer un tiempo en observación en el hospital de Cinco Saltos, y por la tarde descansó del calvario que vivió por casi media hora desde las 9.45 de ayer. Dos hombres ingresaron a su negocio ubicado en -Independencia al 400 de esta ciudad- fingiendo ser compradores, y en cuanto se acercaron al hombre, le apuntaron con los revólveres y lo obligaron a ir hacia la parte trasera del negocio que comunica con la vivienda familiar. Allí comenzaron las amenazas y los golpes. Según indicó la familia, les exigían 30.000 pesos de la venta de un departamento. Sin embargo, los Maldonado no tienen otra propiedad que la familiar y, por ende, no tenían dinero de la venta del supuesto departamento del que hablaban los malvivientes. Los gritos del hombre despertaron a los dos hijos adolescentes del matrimonio, de 15 y 17 años, que fueron maniatados con alambre y tratados bruscamente. Pero el ensañamiento a golpes y puntapiés fue con el jefe de familia en la cocina, donde atado y en el piso, le seguían pegando para que entregara el dinero que creían que había en la vivienda. Luego revolvieron la casa y se llevaron unos 100 pesos más 250 de unas cobranzas que había hecho ayer el verdulero correspondientes a las cuentas corrientes de los vecinos del barrio. "Se llevaron lo poco que teníamos", dijo la mujer, que es trabajadora del hospital. Aparentemente alertados por el timbre de los vecinos y clientes que llamaban al mostrador, los delincuentes huyeron del lugar. Maldonado resultó con lesiones en el cuero cabelludo y en la boca, producto de una trompada. Además de los hematomas en el cuerpo como consecuencia de las patadas que sufrió atado en el piso de su cocina. "Esto es una impunidad e inseguridad total a media mañana", dijo ayer la esposa del comerciante. El subcomisario Mauricio Martín, a cargo de la unidad Séptima, informó que el alerta a la unidad se dio a las 10.10 en tanto ayer era intensa la búsqueda de los dos delincuentes armados, con especial énfasis en las inmediaciones de la ruta 151. |
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