Habrá dos mil empleos nuevos en las chacras

A través de los programas de horticultura y fruta fina, en la Confluencia y Añelo la actividad primaria demandará el equivalente al 10% de los desocupados de esta capital y Plottier.

Extenderán la época de producción

NEUQUEN (AN).- Aun cuando será para la temporada, acotada entre diciembre pasado y finales de marzo de este año, la cosecha de hortalizas y fruta fina en las chacras de Confluencia ocupará unos dos mil trabajadores. Los programas diseñados por el Centro PyME apuntan a extender la estacionalidad de los cultivos, intercalar especies que complementen y prolonguen el ciclo productivo, de manera de sostener la actividad primaria en los sectores de mayor demanda de mano de obra.
Los 2.280 puestos de trabajo calculados por Edgardo Phielipp equivalen al 10% de la población desocupada de esta capital y Plottier, y representan el 13% de los subocupados. Según el Indec, en ese aglomerado urbano, el principal de la Patagonia, la Encuesta Permanente de Hogares calculó que hay 41 mil personas con problemas de trabajo, en un mercado laboral de 127 mil trabajadores potenciales.
Para apoyar el programa de fruta fina, este verano terminarán de instalarse los sistemas de frío modular para garantizar la comercialización en tiempo y con las pautas requeridas por el mercado, según el estado de "congelado individual" o IQF. También se impulsarán las experiencias piloto de exportación vía aérea, que ya iniciaron sus primeras pruebas con cerezas.
En cuanto a hortalizas, esta temporada se ajustarán los mecanismos de entrega de tomate para industria -con un horizonte de producción de mil toneladas-; de tomate perita -1.200 toneladas para clientes de los productores, supermercados locales y extraprovinciales-; zanahoria para el mercado en fresco -200 mil kilogramos-; papa -se producirán 600 mil kilogramos-; zapallo anco -150 mil kilogramos, para supermercados regionales y nacionales- y otras especies menores -200 mil kilogramos, para el Mercado Concentrador y supermercados de la región.

Instalaron dos cámaras de frío

NEUQUEN (AN).- Con una inversión de 170 mil pesos, ya se instalaron en dos establecimientos las cámaras de frío para preparar el congelado individual -IQF- y en bloque de las frambuesas, que permitirán "estirar" su vida útil para comercializar. Esta primera fase, coordinada entre el Centro PyME -que realiza el asesoramiento técnico y canaliza los fondos- y la Cámara de Frutas Finas de la Patagonia, prevé incorporar equipamiento para otorgar el soporte necesario al crecimiento programado de la producción.
Los equipos están en dos establecimientos integrados a la cámara recientemente constituida, que nuclea a fruticultores de la provincia aunque prevé incorporar productores de toda la región y además cuenta con apoyo de productores de provincias de otras regiones del país.
Esta es la primera fase de una inversión en equipos de frío prevista en el programa de fruta fina. Si bien ya existía una base instalada de equipos de frío en chacras de algunos productores, esta etapa es complementaria. En sucesivas fases se incorporará nuevo equipamiento para dar soporte al crecimiento impulsado por la asistencia del programa. El área de márketing del Centro estableció contactos para comercializar el producto, que experimentará el transporte de la fruta por vía aérea a los mercados.

Cultivo de la rosa mosqueta

NEUQUEN (AN).- Edgardo Phielipp dijo que están avanzados los programas de trazabilidad y buenas prácticas, que se diseñaron en colaboración con la Facultad de Agronomía de la UBA -el primero se firmó esta semana para la producción vinícola-, pero que el cultivo de la rosa mosqueta "presenta perspectivas interesantes".
El Centro PyME estudia un relevamiento aéreo de la zona de desarrollo potencial para la explotación racional de la rosa mosqueta en la provincia. Es una franja que se extiende desde el norte en Andacollo hasta el sur en Villa Traful, San Martín de los Andes e incluye Aluminé.
El primer bosquejo de desarrollo lo hicieron técnicos de la provincia en colaboración con productores y profesionales de El Bolsón, donde existe un importante grado de desarrollo del cultivo de esa planta y de la elaboración posterior de derivados -dulces, esencias, aceites-.
Luego del relevamiento en la región, donde esa planta crece en forma silvestre, se amplió la información y se concluyó que existe la posibilidad de organizar el cultivo con "costos razonables".